El Ioniq 5 4WD se pone a prueba en el desierto y supera las pruebas con éxito

El año 2023 supuso el debut del Hyundai Ioniq 5 4WD, aunque se trataba de una aventura solidaria, conocida como El Desierto de los Niños. Ahora, ha vuelto al mismo lugar para ponerse a prueba en una nueva tanda de retos para demostrar que sus dos motores eléctricos son capaces de enfrentarse a los rigores del desierto.

La tracción integral de este modelo proviene de la combinación de un motor eléctrico en la parte delantera que aporta una potencia de 74 kW, mientras que el motor trasero ofrece una potencia de 165 kW. El total que ofrece el modelo es de 239 kW, que equivalen a 325 CV. Con esta configuración, no hay ningún problema para enfrentarse a las duras condiciones que se pueden encontrar en el desierto.

Con los dos motores eléctricos, el coche puede moverse con mucha libertad por las dunas. La potencia inmediata que transmiten le permiten superar las dunas sin demasiados problemas. Se ha probado los distintos modos de conducción que ofrece el modelo para analizar el rendimiento. Según afirman desde la marca, el modo Sport permite tener tracción inmediata, con toda la potencia a disposición del conductor.

Por su parte, con el modo ECO el Ioniq 5 4WD puede navegar entre las dunas con mucha seguridad y con una suavidad muy interesante. El sistema 4×4 variable optimiza el rendimiento en condiciones de baja adherencia. Con esto, se consigue una experiencia de conducción segura y emocionante en cualquier tipo de terreno.

El par motor, indispensable para moverse por terrenos complicados

La distribución de los 605 Nm del par motor es fundamental para que el Ioniq 5 4WD se mueva con tanta libertad por estos terrenos. Se reparte de forma variable entre los dos ejes y asegura que cada tren motriz tenga la fuerza necesaria para afrontar los desafíos del terreno. Las dunas del desierto, que superan en dificultad a los obstáculos normales, no representan un gran problema para este modelo eléctrico.

Autonomía suficiente para moverse por esos terrenos

La batería de iones de litio de 77,4 kWh permite una autonomía de 454 kilómetros en ciclo combinado WLTP. Su consumo medio homologado es de 19,1 kWh cada 100 kilómetros. En estas pruebas, los pilotos consiguieron mantener estas cifras de consumo a unos niveles similares. Para esta prueba, la suspensión de la unidad sometida a la prueba ha sido elevada en cinco centímetros para evitar golpes con piedras. La batería también se ha protegido con una cubierta especial, para evitar problemas por golpes fortuitos.

La capacidad de carga del Ioniq 5 es de hasta 240 kW, lo que permite cargar las baterías hasta el 80% de su capacidad en solo 18 minutos. En la prueba de El Desierto de los Niños se habilitaron varios cargadores rápidos ubicados en alguna de las principales carreteras del norte de Marruecos.

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Mejoras para enfrentarse al desierto

Para superar los desafíos del desierto, el Ioniq 5 se ha equipado con neumáticos mixtos Hankook más grandes, que junto con la elevación de las suspensiones permite funcionar mejor en terrenos complicados. Estas mejoras hacen que la autonomía se resienta, porque el peso se ha incrementado. Pero, para compensar, se ha mejorado la eficiencia energética, por lo que los resultados son similares a los de una versión de calle.

En esta nueva edición de El Desierto de los Niños, el Ioniq 5 se ha convertido una vez más en un coche a tener en cuenta y que puede enfrentarse sin problemas a condiciones de terrenos muy complicadas.