Este novedoso motor de hidrógeno pesa, tan solo, diez kilogramos y está desarrollado por una empresa israelí.
El Grupo Punch fabricará un pick-up de hidrógeno en la planta de Nissan en Barcelona
El grupo automovilístico de origen belga ha puesto su vista sobre la planta de Nissan en la Zona Franca para construir su pick-up con motor de hidrógeno.
La planta de Nissan en la Zona Franca de Barcelona parece salvada. Y esto se debe a la entrada del Grupo Punch, una empresa belga que utilizará las instalaciones de la marca japonesa para fabricar un modelo basado en el Nissan Navara. El popular pick-up japonés se transformará en una camioneta propulsada por hidrógeno. Una acción que permitirá mantener los puestos de trabajo actuales e incluso a los proveedores locales que trabajaban para la misma hasta ahora.
La nueva versión del Nissan Navara utilizará la tecnología H2-ICE, una tecnología que utiliza el hidrógeno como combustible, pero de manera diferente a la pila de combustible, la tecnología más conocida en la que se aplica este elemento. Se conoce también como Hidrogen Internal Combustion Engine o de «hidrógeno caliente«.
Un motor diésel modificado
El motor que utiliza este nuevo pick-up es el motor diésel de 2.3 litros que ya utiliza el modelo, pero ha sido modificado para que pueda ser alimentado por hidrógeno. Esto quiere decir que sigue siendo un motor de combustión, no un vehículo electrificado. El motor ha sufrido cambios en el sistema de inyección, el software de gestión y la adaptación del módulo de control del motor, entre otras cosas.
Todas estas modificaciones no comprometen la autonomía, la carga útil ni la capacidad de remolque. La capacidad de carga se cifra en 1 000 kg y la de remolque es de 3 500 kg. La tracción total permite un buen comportamiento en cualquier terreno y equipa una caja de cambios automática.
Uno de los grandes problemas que presenta este tipo de vehículos es la capacidad de almacenaje del hidrógeno con la presión adecuada ha sido resuelto por la compañía. Con la solución presentada, Punch garantiza la seguridad y la funcionalidad del vehículo. El vehículo comenzará su producción dentro de unos meses y llegará al mercado internacional con varias posibilidades de leasing y alquiler.
Inversión millonaria en Barcelona
El Grupo Punch tiene previsto realizar una inversión de 650 millones de euros en las plantas de Barcelona para poder comenzar la producción de este vehículo propulsado por hidrógeno. Este se ha presentado en el centro de PUNCH R&D de Turín, así que se supone que está ya ultimado y que podrá entrar en producción en poco tiempo. No será el único vehículo que se producirá en la Zona Franca, ya que también hay prevista la fabricación de otros vehículos con batería eléctrica.
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