Ford anuncia un recorte de 4 mil empleos en Europa para mejorar su competitividad
La evolución del mercado en la región bajo condiciones económicas adversas y la desalineación entre las regulaciones de CO2 y el nivel de demanda actual de los modelos eléctricos, han llevado a Ford a tomar esta decisión, según explica la propia compañía.
El fabricante norteamericano acaba de anunciar su intención de reducir su plantilla en Europa en alrededor de 4 mil empleados, de los que 2.900 corresponderán a la planta alemana de Colonia. La compañía ha justificado esta decisión por la necesidad de fortalecer la competitividad de la marca en el mercado europeo.
La caída en la demanda de los modelos eléctricos del fabricante norteamericano en Europa, sobre la que ya os hemos hablado anteriormente aquí en HighMotor, llevó a Ford a tomar medidas previas a esta reducción en el número de empleados, como la reducción de horas de trabajo en su planta de Colonia. Sin embargo, esto parece no haber sido suficiente.
A pesar de haberse iniciado ya la producción de los nuevos Explorer y Capri, ambos basados en la plataforma MEB de Volkswagen, la demanda no ha repuntado lo suficiente. La reducción en el número de horas trabajadas que afectó a 2 mil de los 13 mil empleados de la planta de Colonia, se mantendrá como mínimo hasta el próximo mes de enero. Y a esto hay que añadir ahora la decisión anunciada de recortar el número de empleados.
La noticia se ha hecho pública desde la sede central de Ford en Dearborn, resaltando la necesidad de crear una estructura más competitiva mediante la reducción de costes, para asegurar así la sostenibilidad y el crecimiento a largo plazo del negocio de la compañía en Europa. Ford debe todavía ponerse en contacto con los agentes sociales en Europa, algo que debería ocurrir en las próximas semanas, a los que les transmitirá la necesidad de la compañía de adaptarse a un mercado cada vez más desafiante.
Futuro incierto
La transición hacia la producción en exclusiva de modelos eléctricos en Colonia, después de haber dado por finalizada la producción del Ford Fiesta, fue un paso importante por parte de la compañía en favor de la transición hacia la movilidad eléctrica, no carente sin embargo de riesgos. Con una capacidad de producción anual de 250 mil vehículos, es esencial que los modelos Explorer y Capri sean éxito de ventas en Europa para garantizar la viabilidad de la planta. Algo que, por el momento, no se está produciendo.
Ford reconoce, por otro lado, haber incurrido en pérdidas significativas en el segmento de los vehículos de pasajeros en Europa en los últimos años. Una situación que no puede mantenerse, sin embargo, durante mucho más tiempo.
En el comunicado enviado al gobierno alemán, Ford, a través de su vicepresidente y director financiero, ha enfatizado la necesidad de una agenda política que impulse sin vacilar la movilidad eléctrica, realizando para ello inversiones públicas en infraestructura de carga y ofreciendo de nuevo incentivos a los consumidores; además de ofrecer una mayor flexibilidad en el cumplimiento de los objetivos de CO2, para así mejorar las condiciones del mercado y garantizar un futuro próspero para la industria del automóvil en Europa.
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