Fiat Tipo 2016, presentación y prueba en Madrid

Fiat anuncia su llegada al segmento C, el más importante de nuestro mercado, con un arma muy bien pensada, su nuevo Tipo.

Un modelo de corte sencillo, con unas características que le aseguran una gran notoriedad. Nos desplazamos a Madrid para probarlo, y te lo contamos.

Diseño exterior

Exteriormente el Fiat Tipo es de esos coches resultones, pintones. No tratan de enamorar con su estética, pero sí buscan ofrecer una imagen agradable a la vista, con logradas proporciones. Pese a que no tenga nada que ver, es evidente que el concepto del coche es similar al del extinto Línea, una berlina basada en el Fiat Grande Punto.

El frontal se presenta con líneas fluidas a la vista, con dos grupos ópticos alargados de tamaño generoso, que enlazan perfectamente con la parrilla delantera, con decoración ajedrezada. La parte inferior del paragolpes delantero integra una pequeña entrada de aire y los antinieblas, colocados en los extremos, enfatizando la anchura del coche. Además, el parabrisas tiene una inclinación inusual para lo que se estila dentro del segmento, mejorando la imagen deportiva del coche, así como el coeficiente aerodinámico, cifrado en Cx=0´29.

Las llantas pueden ser de 15, 16 o 17″, con algunos diseños rematados en terminación bicolor o pulida. Incluso la vista lateral está bien conseguida gracias a algunas nervaduras en la carrocería, que fluyen desde el frontal hasta la zaga, dandole más dinamismo y empaque. La zaga se desmarca con unos faros estilo boomerang que se integran estupendamente.

La estampa global del nuevo Tipo es, cuanto menos, satisfactoria. Sin duda los chicos de Fiat han conseguido otorgar a este pequeño sedán de una apariencia armónica, algo que no es tan fácil dentro del segmento C, donde la mayoría de los sedanes no son más que un compacto «con culo».

Diseño interior

Si en el exterior el lenguaje de diseño busca un poquito más el lado «emocional» del coche, en el interior se ha optado por buscar la faceta más racional y comedida. El salpicadero, sin dejarnos fríos, no innova tanto como la carrocería. El diseño también tiende a lo ancho, dividiéndose en dos planos bien estructurados, separados por una moldura central en color plata que recorre el salpicadero a lo ancho.

En la parte superior encontramos una especie de «consola» que recoge tanto el equipo de infotainment como el cuadro de instrumentos, con dígitos grandes y una pantalla multifunción con mucha información. En la parte inferior encontramos una tira de botones que accionan sistemas como los warning, la dirección City o el portón del maletero, para más abajo encontrar los mandos de la climatización. En general la estructuración es buena.

No faltan numerosos huecos portaobjetos, tanto en las puertas como en la consola central, con portabebidas incluidos. La calidad de los materiales utilizados es buena, con plástico acolchado para la parte superior del salpicadero. No es un vehículo de grandes pretensiones, por lo que abundan los materiales duros, aunque los ajustes son buenos. Fallan algunos detalles, como algún tornillo a la vista, o unos asideros en el techo que no están amortiguados, golpeando si se sueltan de golpe.

Los asientos son cómodos, cuentan con un mullido duro y recogen aceptablemente el cuerpo. En el caso de la versión más alta, el del conductor cuenta con apoyo lumbar eléctrico. No pueden llevar calefacción. El habitáculo es amplio, con unas cotas de espacio más que suficientes en la parte delantera. En la parte trasera, el espacio para las piernas es muy bueno, mientras que el de la cabeza se queda un poco justo para estaturas superiores al 1.80 metros.

El maletero cuenta con una capacidad de 520 litros, con formas muy regulares. La superficie útil es de 1×1.02, lo que da buena cuenta de las posibilidades prácticas del sedán italiano. Por supuesto, los respaldos de los asientos traseros son plegables, en proporción 60:40, ya desde el nivel de acabado básico.

Dinámica de conducción y técnica

El Fiat Tipo está construido sobre una plataforma modular que utilizan numerosos modelos del consorcio FCA. En este modelo, se ha optado por una distancia entre ejes bastante generosa, que ayuda a mejorar las cualidades dinámicas del vehículo.

El Tipo llega a nuestro mercado con tres motorizaciones, una de gasolina, 1.4 Fire de 95 CV, y dos diésel, un 1.3 MultiJet II de 95 CV y un 1.6 MultiJet II de 120 CV. Se pueden combinar con cajas de cambio manuales de 5 y 6 velocidades, aunque Fiat está barajando la opción de incorporar una transmisión automática más adelante.

En nuestra toma de contacto hemos tenido la oportunidad de conducir la versión 1.6 MultiJet II de 120 CV, la más potente de la gama, que se presenta con 120 CV, 320 NM, 6 velocidades y unas prestaciones más que notables para un vehículo de su categoría. Con este motor, el Tipo se mueve con perfecta soltura, manteniendo unos consumos que rara vez superarán los 6 litros. Destaca también la finura del motor cuando se mantiene al ralentí, ya que ni se oye ni transmite vibraciones.

Si le buscamos las cosquillas al propulsor, nos damos cuenta de que por encima de las 3500 vueltas la aspereza se hace notable, emitiendo un sonido algo desagradable. De cualquier manera, el motor tiene fuerza suficiente para que no tengamos que estirar por encima de esa cifra prácticamente nunca.

El Tipo monta un esquema de suspensiones muy tradicional, con McPherson en el eje delantero y ruedas tiradas mediante eje torsiones en el eje trasero. La amortiguación es algo blanda, aunque una vez en movimiento hace que el coche apoye bien, con una trayectoria segura y sin descomponerse. El equipo de frenos, con discos en las cuatro ruedas en esta versión y tambores traseros en las otras dos motorizaciones, me ha parecido correcto, con buena capacidad de deceleración.

Equipamiento y precios

Uno de los puntos clave del modelo italiano es el precio, con una completa gama de versiones siempre con un precio de tarifa muy aquilatado. Como primera medida de lanzamiento, Fiat va a lanzar 220 unidades denominadas Opening Edition y Opening Edition+, con un equipamiento más extenso y un precio más ventajoso.

Las versiones Opening, equipadas con el motor 1.4 de gasolina, montan cuatro elevalunas eléctricos, climatizador automático, llantas de aleación de 16″, sensor de aparcamiento trasero y pintura metalizada. Su precio, 10990€. Las versiones Opening+ añaden elementos como la cámara de visión trasera, el control de crucero, las llantas de 17″, los sensores de luz y lluvia y el sistema Connect VP2. Todo, por un precio de 15600€.

Una vez finalice la promoción, la gama se organizará a través de dos equipamientos, el Easy y el Lounge, con un precio que arranca en 9990€ para el Easy 1.4 de gasolina, con un máximo de 14500€ para el 1.6 MultiJet II Lounge.

Fotografía | Daniel Valdivielso