El Fiat 500 pasa el test de choque norteamericano con la máxima puntuación
Existe una antigua teoría en Norteamérica de que cuanto más grande sea el coche que se conduzca, más seguro estará el conductor en caso de accidente. Es por ello, que a través de los años los coches europeos fueron poco menos que despreciados por el público estadounidense. Sin embargo, el pequeñín Fiat 500 ha llegado […]
Existe una antigua teoría en Norteamérica de que cuanto más grande sea el coche que se conduzca, más seguro estará el conductor en caso de accidente. Es por ello, que a través de los años los coches europeos fueron poco menos que despreciados por el público estadounidense.
Sin embargo, el pequeñín Fiat 500 ha llegado y Marchionne se ha empeñado en imponerlo en tan difícil mercado. Dentro de los requisitos para ser comercializado de aquel lado del charco, tiene que pasar las exigentes pruebas de choque de la IIHS. Y las ha pasado con honores.
A pesar de todo, Fiat ha tenido que hacer algunas concesiones para que la IIHS norteamericana le diera al 500 la máxima puntuación. Una de ellas ha sido el cambio de la estructura de los asientos, que le habían dado al modelo anterior del 500, construido antes de julio del 2011, una calificación mucho más baja en la protección de los ocupantes.
La calificación obtenida iguala a la del Ford Fiesta, siempre hablando de los modelos de choque frontal lateral y por alcance, que se usan en EEUU.
Deja un comentario