Ferrari también quiere parar el avance del coronavirus: se detiene la producción del Cavallino Rampante
Ferrari detiene hasta el próximo 27 de marzo su producción por el Covid-19, virus que se expande con suma velocidad por Italia, país natal de la firma.
Primero Lamborghini y ahora Ferrari. Y es que ambas marcas de superdeportivos han decidido detener su producción hasta nuevo aviso con un objetivo muy claro: detener el avance del coronavirus. La casa del Cavallino Rampente acaba de decretar el cese de la fabricación de vehículos en las plantas de Maranello y Módena hasta el próximo día 27 de marzo, fecha en la que Ferrari estima que esta desoladora crisis bacteriológica llegue a sin, aunque no repudian la posibilidad de alargar su cierre en caso de que sea necesario.
Y es que Ferrari no solo pretende ayudar a que su país natal, Italia, gane la batalla al Covid-19, sino también proteger a sus trabajadores. La firma italiana también ha confirmado que esta tediosa situación ya ha comenzado a surgir efecto en su producción, problema que se agrava debido al retraso que están padeciendo sus principales proveedores.
Con esta premisa, se detiene la fabricación del 812 Superfast, GTC4Lusso y el recién estrenado Roma entre otros modelos de gran calibre. Sin embargo y pese a esta repentina pausa de sus factorías, Ferrari ofrece teletrabajo para aquellos cuyo puesto no se desarrollaba en las líneas de montaje pero, aún así, la firma mantendrá intactos los sueldos de sus 4.000 trabajadores en Italia.
Esto también afecta directamente a la Scuderia Ferrari, departamento centrado en la Fórmula 1 que se ha visto obligado a detener su actividad tras la cancelación del Gran Premio de Australia. Sin lugar a dudas, esto supone una gran pérdida económica para la casa italiana, la cual asegura que no solo se siente dolida por sus compatriotas, sino también por su equipo y por sus clientes, a quienes cuidan independientemente del contexto en el que nos encontremos.
Sea como fuere, Ferrari promete volver más fuerte que nunca una vez que la crisis del coronavirus llegue a su fin, acontecimiento que tendrá lugar tras el control de la expansión. De esta manera, la firma del Cavallino Rampante se cobija de la tormenta con la intención de proteger a su gente y a su país, donde la cifra de infectados ya supera los 20.000.
Será tan solo cuestión de tiempo que otras marcas del Grupo FCA detengan su producción en pro de disminuir el avance de esta epidemia que tanto daño está causando. Tras el decreto del estado de alarma en España, tampoco sería extraño que se aplicase una estrategia muy similar en las factorías automovilísticas locales, tales como Opel, Renault, SEAT y PSA.
Deja un comentario