Conducir con seguridad permite que nos olvidemos de multas que nos pueden caer si no tenemos cuidado, pero hay otras que pueden llegar por motivos no tan obvios
Esta es la sanción por no identificar al conductor si recibes una multa
A veces llega una multa que se refiere al vehículo propio, pero el conductor infractor ha sido otro. Esta es la multa por no identificarlo a petición de la DGT.
Cuando se comete una infracción de tráfico, es el propietario del vehículo que ha sido pillado el que recibe la sanción por haber cometido esa falta. Es normal, porque la DGT desconoce quien está conduciendo el vehículo en ese momento y asume que se trata del propietario. Pero a veces, es posible que el conductor sea otro miembro de la familia, un conductor ocasional que ha cogido el vehículo por cualquier motivo.
Tranquilo, el coche puede ser conducido por cualquier persona. Siempre y cuando, claro, tenga la oportuna licencia de conducir. También es recomendable que el seguro tenga registrado a ese conductor ocasional, para evitar problemas en caso de accidente o cualquier suceso que implique al vehículo. Pero eso supone que ese conductor ocasional puede ser también quien haya cometido la infracción, y en ese caso no debe ser el propietario quien reciba la sanción.
Identificar al conductor
Pero, en la comunicación de la sanción la DGT permite identificar al conductor que ha sido cazado cometiendo una infracción de tráfico. De esa manera, la sanción no recaerá sobre el propietario del vehículo, sino sobre la persona que ha cometido esta. En la notificiación hay un plazo de 20 días para realizar esa notificación y pagar la multa.
En caso de que, por algún motivo no se pueda realizar la notificación, esta comenzará a contar desde su publicación en el Tablón Edictal Único, así que se genera la obligación igual. Y el propietario tiene la obligación de identificar al conductor a fin de que la sanción sea impuesa a la persona adecuada.
Pero puede ser que el propietario no quiera identificar al conductor. En ese caso, la ley establece que el propietario del vehículo sea multado con el doble de lo previsto en la multa si se trata de una infracción leve o con el triple de la cantidad impuesta si se trata de una infracción grave. Teniendo en cuenta que la cantidad a pagar en este último caso es de 500 euros, el propietario puede tener que pagar 1 500 euros.
Aunque parezca extraño, el año 2021 se impusieron 60 239 multas por este caso. Esto hace que sea el 1,70% de las multas que se ponen cada año y una de las más frecuentes. Así que, si se recibe una multa a causa de una infracción cometida por otro conductor distinto al propietario, es mejor identificar al conductor, pagar la multa y aceptar la retirada de puntos del carnet, ya que resulta mucho más económico. A parte de respetar la ley, claro…
Deja un comentario