EcoRally RACC, sabor agridulce

Hace unos días participamos en el EcoRally RACC en su segunda edición con un Honda Civic 1.6 i-DTEC, con muy buenas sensaciones con respecto a la primera pero con muchos aspectos importantes aún por mejorar como es el tema del repostaje y el trazado. Pero pongámonos en situación antes de nada.

Se trataba de una prueba de regularidad y consumo, y en ambos casos, según nuestro punto de vista, algo mejorables por la organización de cara al año que viene. La carretera de l’Arrabassada es una de las más transitadas los fines de semana por todo tipo de vehículos, autobuses y coches sin carnet incluidos, dado que es la carretera más corta que enlaza el Vallés con Barcelona sin peajes ni autopistas, además de llegar hasta Tibidabo, un parque de atracciones.

Dicho esto, es comprensible que un 29 de junio, sábado, sea el día perfecto para que comiencen las vacaciones para muchos barceloneses, que, sumando las obras que aprovechan los Ayuntamientos en esta época, hacen que circular por el centro de Barcelona sea algo caótico a media mañana. Salir del centro de Barcelona a las 12h no fue ningún acierto. Los tramos de regularidad para nosotros ya no tuvieron ningún sentido (a pesar de haber finalizados terceros de nuestra categoría): tráfico, mucho tráfico y algún despiste perjudicaban mucho el buen comienzo del siguiente tramo cronometrado, acumulando así segundos imposibles de recuperar sin perjudicar el consumo.

La única esperanza era el consumo. Y así nos lo propusimos, obteniendo unos datos de 4,6 litros a los 100 km. según el ordenador en todo el trazado, algo más de 170 kilómetros. Pero los comisarios no aplicaron el mismo criterio para todos los participantes, llegando incluso a mover el coche para que el combustible se asentara y cupiera más cantidad en algunos coches. Las conclusiones no son muy difíciles de sacar cuando se ve que un participante, un Seat Ibiza 1.2 TDI Ecomotive consumió 2,86 litros según la organización.

La jornada transcurrió por carreteras más o menos transitadas dependiendo del momento, pero cercanas a Barcelona, con una etapa en la mañana con 70 kilómetros incluidos los tramos de enlace y de 100 por la tarde. En total 8 tramos cronometrados de entre 5 y 16 kilómetros, tiempo para muchas anécdotas como no activar el cronómetro, o el cuentakilómetros… Además, los tramos de enlace eran muy justos para ir a una velocidad de unos 50 km/h por lo que era necesario apretar más el acelerador y por consecuencia, perjudicar el consumo.

Por supuesto que íbamos a pasárnoslo bien, con la ilusión de hacer un papel y personalmente creo que lo hemos conseguido, pero para los participantes de las EcoSeries catalanas quizá no haya sido plato de buen gusto haber visto tales medidas. Esperamos que el año que viene solucionen estos criterios y que, tanto el llenado de antes y después lo hagan bajo el mismo criterio. Es cierto que las normas las ponen ellos, y era responsabilidad de cada participante llevar el depósito lleno hasta el parque cerrado.

Pese a estos pequeños contratiempos, como contamos en el blog Honda Dreams, la experiencia fue gratificante, pasamos una jornada muy divertida y pudimos conocer mucho mejor las bondades del motor 1.6 i-DTEC. El resultado fue un 16º puesto combinando eficiencia y regularidad, que de 42 participantes, no está nada mal.

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