La DGT anula más de 15.000 multas de tráfico a causa de un radar mal calibrado

Llevarse una multa de tráfico es algo que puede estropear el día a cualquiera. A veces, esto sucede porque se ha superado la velocidad máxima permitida en un tramo concreto de una vía, y aunque fastidia, se asume. Pero, ¿qué ocurre cuando nos llevamos una multa que no nos corresponde y para la que no hay motivo? Esto es lo que ha ocurrido en el kilómetro 30,253 de la autovía A66, que une Gijón con Sevilla.

En ese punto kilométrico se ubica un radar fijo que se encarga de captar a todos los conductores que superen la velocidad máxima permitida en el tramo y producir la correspondiente sanción. Pero ocurre que por algún motivo, ese radar está mal calibrado e identifica a todos los conductores que pasan por delante de él. Y es que el límite en el punto en el que estaba ubicado el radar es de 120 km/h, el máximo permitido, aunque las multas se generaban a todos los vehículos que superaban los 90 km/h.

Un radar mal calibrado

Todo tiene su explicación, y es que este radar se encuentra a la salida del tunel Ángel Uriel, también conocido como túnel de la Bolgachina. En el interior del túnel hay una limitación de 90 km/h, pero una vez superado hay una señal que comunica que se puede alcanzar de nuevo la velocidad máxima permitida, de 120 km/h.

El radar se encuentra justo detrás de la señal, por lo que al parecer en principio se calibró para multar a partir de los 90 km/h que se marca en el túnel. Pero al estar la señal delante, la velocidad máxima vuelve a ser 120 km/h, por lo que todos los vehículos ya han rebasado los 90 km/h. Y pueden hacerlo perfectamente.

La DGT anulará 2.527 multas de velocidad por un radar mal calibrado

Un radar mal calibrado por un error de un técnico del CTDA, ubicado en León, ha provocado que la DGT anule más de 2.500 multas impuestas por este cinemómetro

Multas anuladas

Este fallo fue detectado en el año 2016 por un ingeniero gijonés que pasó varias veces por el tramo y recibió la correspondiente multa. Tras comprobar en varias ocasiones que no superaba la velocidad máxima permitida, decidió pedir información a la Demarcación de Carreteras. Y allí descubrió que el radar estaba mal calibrado.

A consecuencia de esto, la Dirección General de Tráfico ha tenido que reconocer el error y anulará todas las multas impuestas desde este momento y devolverá el dinero y los puntos a los conductores sancionados por este radar. En total son 15.864 multas las que se anularán, pero hay una petición de la Unión de Consumidores de Asturias (UCE) para que se anulen todas las multas realizadas por este radar, incluso las anteriores a 2016 y se devuelva dinero y puntos a todos los presuntos infractores.

Por el momento, el radar ha sido recolocado en otro lugar, se ha eliminado la caja que lo contenía hasta el momento y se ha recalibrado a la velocidad correcto. Más de 15.000 infracciones que no lo eran han sido anuladas y podría ser que dentro de unas semanas esta cifra aumente considerablemente.