Descarbonizar coche diésel, ¿por qué debes hacerlo?
¿Por qué se debe descarbonizar un coche diésel? Te lo contamos.
¿Tienes un coche diésel? No te preocupes que no te vamos a criticar ni nada por el estilo. Lo que sí vamos a hacer es darte un buen consejo. ¿Sabías que descarbonizar un coche diésel es fundamental para su correcto funcionamiento? Tras la pandemia del Covid-19, el uso del coche se ha reducido por lo que es un buen momento para llevar a cabo una descarbonización. Es posible que el término te suene complicado pero no te preocupes que es muy fácil.
En realidad, descarbonizar un coche diésel es eliminar la posible carbonilla que se ha quedado adherida en el interior del bloque motor. Además, la descarbonización permite realizar a tu coche diésel un mantenimiento preventivo que evita posibles averías. Los coches diésel son más propensos a acumular carbonilla porque los procesos de combustión no se completan y no se quema todo el combustible.
Lo cierto es que esa carbonilla se debería expulsar por el escape pero la válvula EGR recircula los gases de escape sucios y los vuelve a introducir en la admisión. De esta forma, la EGR se puede taponar. Esto se puede notar mediante una pérdida de potencia, un aumento de consumo e incluso un funcionamiento más brusco. La carbonilla no solo se produce por esto, también influyen los hábitos de conducción como utilizar el coche a bajas revoluciones o trayectos cortos en los que el coche no llega a calentarse.
¿Por qué es aconsejable descarbonizar un coche diésel?
Te recomendamos que descarbonices tu coche diésel, sobre todo si tienes que pasar la ITV pronto. Este proceso te permitirá afrontar la prueba de emisiones con solvencia, pero lo más importante es que esto te permitirá alargar la vida útil del motor de tu coche y evitar posibles averías.
Para descarbonizar un coche diésel se pueden utilizar dos formas diferentes. El primer método pasa por introducir orto-oxihidrógeno puro en la admisión, mientras que el segundo método pasa por la conexión de una máquina al sistema de alimentación/inyección del motor. De esta forma, en vez de utilizar gasoil como combustible se utiliza un líquido especial. Lo que ambas técnicas buscan es una mayor temperatura de combustión para acabar con la carbonilla acumulada.
Si tu coche diésel no está en plena forma, estos procesos pueden someter al vehículo a un sobreesfuerzo, por lo que antes de nada, se debe comprobar que la avería no radica en el turbo, los inyectores o demás elementos. Además, la descarbonización no es mágica y no es la solución a cualquier avería de un coche diésel.
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