He aquí cuatro deportivos que se han vuelto asequibles con el paso del tiempo

¿Quién no ha fantaseado alguna vez con hacerse con ese deportivo de ensueño y darle a nuestro garaje el capricho que tanto necesita? Este genuino sentimiento ha llevado a los más petrolhead a escrutinar con diligencia las páginas oficiales de las marcas más exclusivas del mundo, las cuales cuentan con un atractivo elenco de deportivos dispuestos a hacernos soñar con ellos. Sin embargo, su inalcanzable precio para una gran mayoría hace que rápidamente sean descartados y almacenados en nuestro cerebro como lo que son, sueños.

Pero, ¿qué pasaría si os dijese que los sueños se pueden hacer realidad? A veces tan solo hace falta con echar un vistazo algo intenso por los diferentes portales de segunda mano para percatarnos de que la depreciación ha azotado con diligencia a auténticos deportivos. Sí, es cierto, debemos tener en cuenta que estamos ante vehículos cuyo mantenimiento, consumo y cuidado es el equivalente al de un coche que costaba en su día cerca -o más- de 100.000 euros, y ya sabemos los problemas que eso puede acarrear.

Sin embargo, a veces los números nos cuadran, el mantenimiento no será un problema y tan solo se vive una vez. Es por esto que hoy, petrolheads empedernidos, os traemos una lista de cuatro deportivos que con el paso del tiempo su precio se ha mermado hasta el punto de convertirse en coches más o menos asequibles.

Audi R8 V8

Audi revolucionó el sector automovilístico por allá en año 2006 con el lanzamiento del R8, un superdeportivo de gran talante que estaba dispuesto a infringir mucho daño a la competencia. Gracias a una calidad de acabados a la altura de la casa que le daba cobijo, un diseño atrevido y agresivo y un elenco de motores puros y deportivos, el R8 rápidamente se convirtió en deseo de muchos.

En la actualidad, su segunda generación lleva el testigo y se hace cargo de mantener inalterado el éxito que generó la primera entrega, la cual goza ahora de un precio muy interesante en el mercado de ocasión. Para ser más concretos, es posible hacernos con un Audi R8 equipado con el propulsor V8 atmosférico de 4.2 litros por poco más de 45.000 euros, una cifra en que la hoy en día se mueven vehículos como el Volkswagen Golf R, Honda Civic Type R, Focus RS o CUPRA Ateca.

BMW M3 E92

Si eres un auténtico fanático del mundo del motor seguro que cuando piensas en BMW se te viene a la mente su maravilloso elenco de vehículos M. Dicha letra se ha encargado durante años de transmitir deportividad, pasión y pureza a través de una serie de vehículos que, por desgracia, se encuentran asociados a un precio que tan solo unos pocos pueden asumir.

Sin embargo, hoy en día es sencillo encontrar unidades del M3 E92 en el mercado de segunda mano rondando los 35.000 euros. Si tenemos en cuenta que se trata de un deportivo de tracción trasera, con la posibilidad de asociarse a un cambio manual de seis velocidades y animado por un motor V8 atmosférico de 420 CV, nos percataremos rápidamente de que es un precio muy atractivo.

Aston Martin Vantage

Aston Martin siempre ha sido una marca que se ha encargado de actuar como indiscutible sinónimo de elegancia y deportividad. A través de las películas de James Bond hemos sido testigos de cómo el agente secreto atrapaba a los malos con una clase sin precedentes gracias a su montura inglesa, y mentiríamos si dijésemos que nunca hemos querido estar en su pellejo.

Gracias a la devaluación de modelos como el Aston Martin Vantage, podemos sentirnos como James Bond sin la necesidad de plantarle cara a un desmesurado desembolso. De hecho sería sencillo hacernos con una unidad del Vantage equipado con el propulsor V8 de 380 CV por una cantidad comprendida entre los 40.000 y 50.000 euros, un rango de precios que hará que nos planteemos al deportivo inglés como una opción muy a tener en cuenta.

Porsche 911 997

El Porsche 911, el deportivo de los deportivos, el coche que todo amante del mundo del motor debería probar alguna vez en su vida. Siempre se ha catalogado al hijo predilecto de los de Stuttgart como una de las máquinas más precisas y rápidas del mundo pero, como viene siendo habitual, su alto precio ha provocado que muchos lo catalogasen simplemente como sueño.

Pero en la actualidad el 911 997 puede hacer que nuestro garaje pase a estar ocupado por un deportivo de pura cepa. Dicha generación del nueveonce dejó atrás el polémico diseño del 996 para volver a una estética más conservadora pero que se encargaría de marcar las pautas de los 991 y 992. A día de hoy, podemos hacernos con un Carrera o Carrera S por algo menos de 40.000 euros, una cantidad de dinero por la que se ofertan numerosos compactos deportivos.