¿Cuánto cuesta el parabrisas de un superdeportivo? La respuesta te dejará helado

Está claro que los superdeportivos son vehículos que tienen un precio prohibitivo para cualquiera. Y que los propietarios de los mismos no tienen problemas de liquidez, pero desde luego, el mantenimiento de este tipo de coches puede convertirse en una auténtica pesadilla si se tiene que realizar alguna reparación. Cada pieza tiene un coste tan alto, que en algunos casos se podría comprar un coche de gama baja o media con el precio de la misma.

Hace poco se ha hecho viral lo que va a costar un parabrisas nuevo para un McLaren F1, un modelo del fabricante británico que se produjo entre 1992 y 1998. Se fabricaron 106 unidades, así que se trata de un superdeportivo que además es bastante escaso, lo que hace que su precio sea muy elevado. Se cree que un modelo bien conservado de este modelo tenga un precio de unos 20 millones de euros.

Esta cuestión arrancó cuando Coleen Sheehan, vendedora de coches clásicos de alta gama, vió dos unidades de este modelo estacionados en un evento de Estados Unidos. Ambos coches tenían el parabrisas agrietado, lo que le provocó la pregunta. ¿Cómo de caro es cambiar el parabrisas de un coche de estas características para que estuvieran así?

La respuesta es bastante sorprendente, porque con el precio del parabrisas cualquier persona de a pie podría comprar un coche de gama media. El precio de este importante elemento es de unos 25.000 dólares, aunque a ese precio se ha de añadir la mano de obra especializada para colocarlo de forma correcta.

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Esto asciende a la cantidad de 8.000 dólares, así que la broma de cambiar ese parabrisas agrietado ascendecría a unos 33.000 dólares. El precio de un coche nuevo con características interesantes. Desde luego, al propietario de un coche valorado en 20 millones de dólares no representa ningún problema para hacer frente a este gasto, pero ofrece una idea de lo que cuesta mantener en perfectas condiciones un vehíuculo de estas características.

Los superdeportivos no puede comprarlos cualquiera, pero tampoco mantenerlos. Aunque se consiga uno de estos coches tan exclusivos a un precio más ajustado, el mantenimiento sigue siendo tan caro que lo convierte en algo muy complicado de mantener.