¿Crees que esto fue suerte o solamente se salvó por mantener una velocidad razonable?

Recuerdo lo que mi padre me enseñaba cuando aprendí a conducir: no es tanto lo que tú puedas hacer mal, sino lo que los demás puedan hacer mal. Un accidente puede tenerlo cualquiera, incluso sin tener la culpa de nada, como casi le ha ocurrido a este conductor ruso que salvó providencialmente de ser aplastado bajo un camión.

Conducir de acuerdo a las condiciones de la carretera. No todo en esta vida es circular a 140 o 150 por hora, más rápido que nadie y mirando de soslayo a quienes adelantamos; porque si el tío éste llegaba a ir un pelín más rápido, creo que no cuenta el cuento. Sigue el salto y luego me dices si definitivamente tuvo suerte (bueno, algo de suerte tuvo, de que no le apareciera otro vehículo de frente, por ejemplo) o si se salvó por ir a una velocidad moderada.

Vía | Zer Customs