Los compradores estadounidenses los prefieren pequeños: el tamaño (y el precio) importa

Durante mucho tiempo, los compradores estadounidenses no concebían la posibilidad de adquirir un coche que no fuera grande. Las largas distancias que hay en el país, además las exigencias de movilidad hacían que los vehículos más grandes tuvieran una mayor aceptación. Más espacio, más potencia y más presencia. Pero también más consumo, aunque el precio de la gasolina hacía que esto no fuera un problema.

El mercado ha cambiado mucho y hoy hay una visión diferente sobre lo que debe de ser la movilidad. Así que los estadounidenses estén cambiando su forma de entender la movilidad. Y uno de los motivos que tienen para hacerlo es el precio del combustible y el de los propios vehículos.

Coches más pequeños y más económicos

El mercado está cambiando y eso se nota en los concesionarios estadounidenses. Los modelos grandes y caros comienzan a perder fuelle y se están registrados caídas en las ventas. Cada vez hay más compradores interesados en vehículos más pequeños y económicos. Las ventas de grandes pick-ups, un tipo de vehículo muy atractivo en el país, han caído un ligero 1,9% y las de los SUV de tamaño medio ha disminuido un 2,3%.

Y ¿qué ha pasado con los modelos más pequeños y asequibles? Pues con esto, los compradores que se interesan por este tipo de modelos se encuentran con que hay pocas opciones en los concesionarios que se ajusten a sus deseos y necesidades. Aún así, las ventas de este tipo de modelos más pequeños ha crecido un 23%.

Eso, durante todo el año, pero en el mes de noviembre las ventas de coches compactos creció un 16% y la de SUV compactos se incrementó un 11,5%. En la actualidad, apenas hay 11 modelos en el mercado estadounidense que tienen un precio por debajo de los 25.000 dólares, aunque se espera que en 2025 se alcance una cifra de 45 modelos que reúnan estas características. Un síntoma muy evidente de que el mercado está cambiando.

Un modelo que ha ido ganando presencia en el mercado ha sido el SUV compacto que ofrece Chevrolet, el Chevrolet Trax. La marca ha retirado del mercado la mayoría de modelos compactos y berlinas y solo presenta este modelo en un segmento similar. Y esto ha hecho que sus ventas crezcan un 89% en el mes de noviembre.

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Los coches económicos y los futuros aranceles de Trump

El problema es que los compradores buscan coches económicos, pero la mayor parte de estos modelos, aunque son de marcas estadounidenses, se fabrican fuera de Estados Unidos, en México y Canadá. Y Donald Trump ha anunciado que pondrá duros aranceles a los coches que llegan desde estos países.

¿Influirá esto en la venta de coches compactos y más económicos? Es pronto para saberlo, pero ya sabemos que cuando comienza una tendencia de compra en la industria de la automoción, es difícil pararla y el mercado estadounidense parece decantarse hacia los coches más asequibles, con un consumo más moderado y un tamaño más pequeño de lo que están acostumbrados los estadounidenses.