Coches con Historia: Dodge Deora

El Dodge Deora merece estar dentro de una lista de los 10 conceptos más extraños que se hayan construido, aunque la verdad es que tiene su gracia por la forma futurista, en la que intentaron plasmar lo que sería una pick-up del futuro. No por nada este concepto se planificó en 1964, una época en que muchas marcas y carroceros tenían una imaginación prodigiosa en cuanto a coches que supuestamente deberían ser vistos en las calles en años venideros.

El Deora fue diseñado por un diseñador de GM, Harry Bentley Bradley y construido por dos personalizadores de renombre de Detroit llamados Mike y Larry Alexander, que equivaldría a que hoy en día mencionásemos a Chip Foose. En un principio se intentó buscar el apoyo de GM para proveer todo lo necesario para su construcción, pero sin éxito; había que buscar otro vehículo que se sacrificara para darle vida al Deora y este no fue otro que la pick-up Dodge A100.

La idea era cortar una sección de los pilares del techo de la Dodge A100 para reducir su altura y dar la impresión de que todo el vehículo era más bajo. El resto de los componentes se podían sacar de otros modelos, convirtiéndose el Deora en una especie de Frankestein; el diseño también incluía el uso del portón trasero de un Ford Station Wagon de 1960 para permitir el acceso frontal a la cabina; mientras la puerta pivotaba para permitir el acceso a dos personas, la parte superior del parabrisas podía levantarse mediante un motor eléctrico.

El motor originalmente colocado adelante en el Dodge A100 original tuvo que ser ubicado en lo que se correspondía con el espacio de carga; el radiador se mantenía a una temperatura aceptable gracias al uso de ventiladores eléctricos, mientras que el depósito de combustible fue movido atrás de la cabina. Todo ello estaba convenientemente oculto por la tapa que cubría la caja de carga.

El Deora fue presentado en el Autorama de 1967 y mantenido como coche de exhibición por dos años antes de ser vendido en 1970. Con el correr de los años, el coche ha permanecido en manos de la misma persona así que se explica que aún se mantenga en un estado bastante respetable, a pesar de haber sido restaurado una vez, en el año 2002.

El Dodge Deora es el claro exponente de días en que la imaginación era lo que se anteponía ante las cifras de consumos, las emisiones, o la seguridad. Uno de los conceptos más extraños del mundo y que habrás conocido mediante el famoso modelo a escala de HotWheels.