C3 Citroen Compactos Gama / versiones
El Citroën C3 se hace oficial, ¿un «mini Cactus»?
Citroën nos muestra la renovación del C3. El cambio es bastante notable de una generación a otra, y ahora, el modelo francés se encuentra más enfocado a un público juvenil. El Citroën C3, entre otras muchas cosas, llama la atención por incorporar los elementos Airbumps que tan famosos se hicieron con el Citroën C4 Cactus.
Citroën ha presentado hace unos minutos el nuevo Citroën C3. Uno de los modelos más pequeños de su gama y de los que más va representar a la marca en cuanto a ventas en los próximos años o, al menos, eso espera la multinacional del doble chevrón.
El C3 ha recibido una completa renovación y ahora busca una identidad más simpática, apta tanta para jóvenes como para personas de media edad. Para ello, ha utilizado algunas de las características que tan bien le han venido al Citroën C4 Cactus, de hecho, le dan un cierto parecido.
Exterior
Como podemos ver en la foto de la cabecera, la imagen principal cambia por completo con unos faros de muy pequeñas dimensiones, finos y alargados, que se encuentran en la parte superior dando lugar a la luz diurna. Por raro que resulte, los faros principales (luces cortas y largas) se encuentran en una zona muy baja, algo más arriba de la mitad del paragolpes. En parte, todo esto nos recuerda bastante al monovolumen C4 Picasso. En diferencia con los de la luz diurna, estos presentan unas formas más redondeadas. La calandra principal también es muy fina y parece que únicamente está ahí para que sepamos donde termina el paragolpes y empieza el capó.
Su carrocería mide 3,99 metros de largoEn la vista lateral ya encontramos muchas más similitudes con el C4 Cactus. Aparecen los conocidísimos “Airbumps” en las partes inferiores de las puertas que tanto dieron que hablar en el crossover francés. También algunas de las llantas son heredadas del Cactus. Al igual que en la parte delantera (y en la trasera) la zona inferior de la carrocería se encuentra “protegida” por plásticos acabados en negro. Los tres pilares aparecen pintados en negro, buscando crear una sensación de que el techo se encuentra flotando en el aire, algo muy utilizado en el sector últimamente.
Esas protecciones de la parte inferior de la carrocería que mencionábamos anteriormente, cobran un alto protagonismo en la zaga, estando en esta parte del coche muy presentes y destacando, tal vez, demasiado. Los pilotos son ovalados y guardan cierta similitud con los de la anterior generación.
Interior
El interior mantiene parte de la esencia del Cactus, pero lo mejoraSi nos referimos al interior, el Citroën C3 ofrece una alta posibilidad de personalización, con varios opcionales y múltiples decoraciones a nivel de colores, con cuatro ambientes diferentes. Como en otras creaciones de la marca, la consola central presenta un diseño limpio con una pantalla en la que se centralizan prácticamente todos los sistemas del coche (sí, también la climatización).
Un punto, a nuestro gusto, muy a favor es el cuadro de instrumentos. En este modelo no se ha utilizado una pequeña pantalla para mostrarnos las informaciones principales del coche, sino que se ha recurrido a un cuadro más tradicional. Por suerte, y no como en el Cactus, a los chicos de Citroën en esta ocasión no se les ha olvidado incorporar el cuentarrevoluciones. Si nos fijamos en la imagen vemos como para dar un toque más de distinción han vuelto a utilizar esa especie de correa para el tirador de la puerta. Muy simpático.
El maletero tiene una capacidad correcta para el segmento en que se mueve, 300 litros de volumen.
Motorizaciones
En cuanto a las ofertas mecánicas, se podrá escoger entre tres motorizaciones PureTech de gasolina y dos diésel BlueHDi. En gasolina tenemos el bloque tricilíndrico 1.2 con versiones de 68, 82 y 110 caballos, siendo el último de ellos sobrealimentado por turbo. Las opciones diésel 1.6 BlueHDi rinden 75 y 100 caballos. Todos ellos se asocian a cambio manual pero la compañía afirma que también habrá motorizaciones disponibles con cambio automático EAT6.
Equipamiento
Citroën nos presenta el ConnectedCam. Se trata de una cámara de alta definición ubicada en el parabrisas diseñada para registrar incidencias de tráfico y accidentes. Es decir, si tenemos un accidente, el coche lo detectará y esta cámara guardará la grabación de unos segundos antes y después del mismo. Aparte, el conductor también podrá pulsar un botón y hacer fotos y vídeos desde la misma.
Otros equipamientos disponibles son el navegador, cámara de marcha atrás, ayuda al arranque en pendiente, alerta de ángulo muerto, detector de fatiga y servicio de asistencia SOS para casos de accidentes.
Aún no conocemos los precios definitivos para nuestro país, pero sí sabemos que la llegada a los concesionarios está prevista para comienzos de 2017.
Fuente | Citroën
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