Un cascarón de pick-up Chevrolet de 1947 se convierte en una bestia del slalom

Algún día podríamos hablar largo y tendido del tipo de vehículo que armaríamos a partir de uno antiguo o con piezas de otros vehículos, si tuviéramos dinero y tiempo. Tal vez algo como esta pick-up Chevrolet de 1947 que en otras circunstancias hubiera terminado como un bonito cubo de metal. Sin embargo, el dinero todo lo permite y hasta ha permitido que este cascarón inservible resucitara con un motor V8 de 400 caballos.

El bastidor de la vieja pick-up fue reemplazado por el de una Chevrolet S-10, lo cual daba aproximadamente el mismo tamaño. Sin embargo ha sido necesario acortar el nuevo bastidor aún más, para llegar a la idea final. Con el poco peso que tiene (poco más de 1000 kilos) y lo corto de la carrocería, el agregado de un bloque pequeño de V8 de 400 caballos no ha hecho más que acelerar las pulsaciones de los creadores de semejante pick-up, convirtiéndolo en una máquina de derrapes.

Ya sabes que los americanos tienen mucho de donde elegir a la hora de conseguir piezas aqui y allá: los frenos de un Camaro de tercera generación le cayeron como perlas a esta «47», mientras que algunas partes tuvieron que se construidas específicamente, como la suspensión trasera, encargada de entregar una tracción a la altura de las competencias de slalom.

Si el aspecto general de la pick-up llama la atención, además de su corta distancia entre ejes, es gracias a los descomunales neumáticos en medidas 15/35/17 y 335/35/17 para los traseros. Unas bonitas llantas Cragar han encontrado su lugar aqui, a pesar de que como podrás ver en el «antes y después», la carrocería está prácticamente igual a como estaba cuando fue rescatada del deshuesadero.

Algo así no es para verse todos los días. Particularmente el estilo de los guardabarros ensanchados y el toque rat rod en la carrocería. Y por si todo ello fuera poco, el techo fue cortado casi 10 centímetros.

Vía | Speed Hunters