Bosch y la conducción automatizada en la ciudad

La tecnología de conducción autónoma es algo que poco a poco se va mostrando como una realidad que llegará a ser fiable en un futuro próximo con más pruebas y ajustes para su correcto funcionamiento. Varias son las marcas que están desarrollando este tipo de tecnología y que va dando sus frutos cuando se pone en funcionamiento con tráfico real.

Bosch a través de su proyecto UR:BAN desarrolla un nuevo sistema de asistencia que ayuda a los conductores a evitar los atropellos de peatones. En el día a día se pueden dar diversas situaciones en las que pueden verse implicados bicicletas, motocicletas, camiones y autobuses dentro de las ciudades. Muchas veces se pueden encontrar coches en doble fila y a los peatones cruzando la calle de forma imprevisible.

Dietrich Manstetten, que trabaja en investigación e ingeniería avanzada de Robert Bosch GmbH, junto con Lutz Bürkle y un equipo de 11 investigadores han conseguido grandes avances enseñado a los coches a predecir lo que va a ocurrir a continuación evitando así atropellos, gracias a que los conductores pueden realizar acciones evasivas.

Configuración y registro de datos del sistema

Como requisito previo para que esta conducción automatizada funcione, se deben incorporar unos sensores que monitoricen de manera fiable el entorno del vehículo. La cámara de vídeo estéreo de Bosch es la que se encarga de este reconocimiento. Ya se monta en algunos vehículos y se sitúa detrás del parabrisas, cerca del espejo retrovisor.

La cámara controla la parte delantera del vehículo transmitiendo toda la información a un procesador situado en el maletero que se encarga de analizar los datos más de diez veces por segundo. Bosch va un paso más allá y no sólo hace que este sensor detecte la posición actual de los peatones y ciclistas, sino que también predice dónde estarán inmediatamente después.

El sistema ayuda a los conductores a frenar y a realizar una maniobra evasiva a una velocidad de hasta 50 km/h. Las distracciones al volante es uno de los principales factores que influyen cuando se produce un suceso de este tipo. El sistema de asistencia puede ayudar a evitar que una posible colisión finalmente se produzca en el 58% de los casos.

La observación del conductor es la solución con la que Bosch supervisa la línea de visión de éste mediante unas diminutas cámaras situadas en el interior del vehículo. De esta forma, se puede avisar a los conductores distraídos con la antelación suficiente para evitar una situación peligrosa. La colocación de indicadores en el salpicadero o de una pantalla LED en el panel de control situado en el campo de visión del conductor sería de gran ayuda.

Sistema de observación del conductor

Cuando se conduce por espacios reducidos o cuando se realizan giros se puede pasar por alto a los peatones que quieren cruzar la calle desde la derecha o desde la izquierda. Para ello Bosch ha desarrollado un asistente sólo para estas situaciones que reconoce las señales de paso de peatones y puede detener completamente el coche antes de que se pueda llegar a producir un accidente.

Otro de los aspectos que cabe destacar sobre este sistema es la capacidad de la cámara de vídeo estéreo para analizar la conducción en espacios reducidos o con obstáculos como son los coches en doble fila. El procesador calcula la trayectoria que debería llevar el vehículo y toma el control de la dirección eléctrica asegurándose de que el automóvil maniobre correctamente. Si el sistema reconoce que el espacio es insuficiente, detiene el vehículo completamente antes de que los retrovisores exteriores resulten dañados.

A partir de 2020, se espera que los vehículos que ofrezcan esta tecnología de Bosch sean capaces de conducir por si mismos de forma altamente automatizada por las autopistas, sin necesidad de una supervisión constante del conductor.

Fuente | Bosch