BMW nos muestra el futuro en la gestión de sus vehículos eléctricos: la centralita «Heart of Joy»

¿Te has enamorado del BMW Vision Driving Experience que ilustra estas líneas? Pues olvídate de él porque no es un vehículo que BMW tenga pensado llevar a la producción en algún momento del futuro, simplemente se trata de un vehículo ex profeso para utilizarlo como banco de pruebas y más concretamente de la centralita denominada «Heart of Joy», la que se encargará de gestionar el tren motriz y la dinámica de conducción de su vehículos eléctricos Neue Klasse.

Todos y cada uno de los nuevos modelos totalmente eléctricos de la Neue Klasse se beneficiarán de la centralita Heart of Joy de BMW, la cual ha sido desarrollada íntegramente por la marca alemana que además también la fabricará en serie, llegando a las carreteras este mismo año coincidiendo con la fabricación y puesta en circulación del primer modelo de la Neue Klasse.

El procesamiento informático es diez veces más rápido

El BMW Vision Driving Experience es un laboratorio sobre ruedas tan espectacular que consigue desarrollar un par motor de 18.000 Nm, por lo que BMW afirma que si esta centralita es capaz de gestionar esta magnitud de potencia dada de forma instantánea será capaz de manejar las exigencias de la conducción diaria con facilidad. Y de hecho lo hace con mucho facilidad, tanto que para las subfunciones de transmisión, frenos, carga, recuperación y dirección es capaz de procesar diez veces más rápido que los sistemas actuales.

Heart of Joy, junto con el software BMW Dynamic Performance Control, llega a un nuevo nivel de velocidad y precisión convirtiéndose en una de las cuatro unidades centrales de control de la Neue Klasse, combinando por primera vez funciones de transmisión y dinámica de conducción. Esta unidad, o centralita, es capaz de controlar la aceleración y el frenado, la estabilización del vehículo, las funciones de dirección y la gestión de la carga, todo ello perfectamente coordinado y haciendo que todos los actuadores conectados respondan directamente con un rango de retardo de milisegundos.

Curvas más precisas y el proceso de frenado más suave del mundo

Cuando nos encontramos en carreteras reviradas la combinación de Heart of Joy con BMW Dynamic Performance Control dará al vehículo aplomo y por tanto un mayor nivel de seguridad, pudiendo trazar curvas con una precisión pasmosa y provocando además que no haga falta realizar tantas correcciones. En situaciones contrarias, como a baja velocidad o realizando maniobras, las transmisiones directas de señales y el rápido procesamiento de la información garantizan una conducción más efectiva. Aunque también hay que reconocer y tenemos que ver que ésta será más automatizada y por lo tanto carente de sensaciones salvo por la aceleración instantánea que proporcionan los vehículos eléctricos.

BMW ha conseguido un aumento en la eficiencia del 25%

Gracia a Heart of Joy también se ha conseguido el control integrado de la transmisión, el frenado y la recuperación de energía pueda utilizar la energía de forma más eficiente. De hecho, BMW afirma que en el 98% de los conductores no necesitan realizar ninguna intervención con los frenos convencionales, ya que la sola potencia de frenado unto con la recuperación de energía es más que suficiente para la conducción diaria salvo en frenadas bruscas, donde obviamente si entran en funcionamiento los frenos convencionales. De esta manera, la eficiencia gracias a esta centralita se ve aumentada en un 25%.

Como curiosidad destacar que BMW ha instalado en el Vision Driving Experience códigos de colores luminosos en las llantas, de manera que si lucen en verde significa que esta acelerando, en azul recuperando energía y naranja si está frenando con los frenos de ficción; provocando una imagen más futurista si cabe.