El BMW M135i xDrive será aun más divertido de conducir gracias a las actualizaciones dinámicas que ha recibido

Si queremos ser los felices propietarios de la variante más deportiva de la actual Serie 1 de BMW tendremos que decantarnos por el M135i xDrive, un modelo que compite dentro del segmento de los compactos premium deportivos y que lleva ya entre nosotros un par de años. Este modelo destaca por irradiar deportividad por todos sus costados especialmente gracias al motor que lo anima, el cual será mejor aprovechado gracias a la actualización introducida por BMW.

Normalmente una actualización cuando llegamos a los dos años de su lanzamiento suele venir acompañada de algún cambio estético, pero en este caso no ha sido así ya BMW se ha limitado a dejar en apariencia al M135i xDrive tal y como lo conocemos. Tan solo se limitan a ampliar la paleta de colores creados por BMW Individual con nuevas tonalidades, que son el M Sao Paulo Yellow que ya conocemos de otros modelos como el M4 Competition además del Frozen Orange metalizado y el Frozen Pure Grey.

De esta manera, como imaginaréis, las actualizaciones a las que se ha visto sometido el BMW M135i xDrive se encuentran escondidas en su interior, unos cambios que van a permitir que el M135i xDrive sea un vehículo más manejable así como divertido de conducir pero que además permitirá aprovechar aun más su potente motor de cuatro cilindros en linea con tecnología BMW TwinPower Turbo, capaz de entregar una potencia de 306 CV que lo lanza hasta los 100 km/h en tan solo 4,8 segundos.

En líneas generales las mejoras que BMW ha introducido en el M135i xDrive se centran en aumentar el ángulo de caída o «camber» de las ruedas delanteras, de manera que se así se permite una mayor absorción de las fuerzas laterales en los pasos por curva. Además, también se ha montado un nuevo soporte hidráulico en las suspensiones,  se han rediseñado los brazos de control y de arrastre y se ha recalibrado el sistema de suspensión, resultando en un mejor comportamiento en el balanceo de la carrocería en las curvas y un mejor tacto en la dirección, especialmente cuando se trata de sacar toda su garra deportiva.

Estas modificaciones realizadas, junto con la puesta a punto específica de su chasis, hace que el M135i xDrive aproveche mucho mejor su motor y toda la tecnología que le rodea. Recordemos que de serie equipa elementos muy interesantes como el diferencial de deslizamiento limitado integrado en la propia transmisión automática Steptronic de 8 velocidades, los frenos M Sport o la dirección deportiva M Sport puesta a punto para este modelo, sin olvidarnos del Dynamic Stability Control (DSC) capaz de modificar el comportamiento de la propia dirección, los frenos o el diferencial.

Para terminar, la guinda del pastel la pone la nueva línea de escape que montará el BMW M135i xDrive, puesta a punto para que desde el momento en que se ponga en marcha sea capaz de sobrecogernos y, una vez a bordo, transmitir a todos los ocupantes y en especial al conductor todas las respuestas y sensaciones del cuatro cilindros en línea.