Bentley muestra al primer Bentayga EWB creado por Mulliner con tonalidades bicolor

Las marcas de lujo saben que han encontrado un filón importante para aumentar sus ventas a través de trabajos de personalización individualizados, y sino que se lo pregunten a Rolls-Royce con por ejemplo el Arcadia Droptail, el último de sus trabajos exclusivos pertenecientes a una serie modelos que se van a ir desvelando poco a poco y con los que pueden ingresar cantidades obscenas de dinero, todo ello sin tener en cuenta el precio base del modelo elegido para servir como base.

Otra de esas marcas que han sabido aprovechar muy bien este tirón es Bentley con su división de personalización Mulliner; muestra de ello es que los encargos no paran de crecer con alrededor de un 75% de los pedidos que recibió Bentley en 2023 fueron para ser tratados a través de Mulliner, lo que representa un aumento del 45% respecto al año 2022 el cual ya de por si supuso un año de récord para los especialistas de Mulliner. Ahora nos presentan la última de sus creaciones, sobre un Bentayga EWB que nos muestran orgullosos al tratarse de la primera creación bicolor que realizan.

La base que en concreto se ha tomado para la realización de este proyecto es un Bentley Bentayga EWB Azure First Edition, una versión especial de lanzamiento que pudimos conocer poco antes de que llegara al mercado a comienzos del verano del 2022 y que esta unidad en concreto pertenece a una pareja de Irvine, California. Esta versión se encuentra equipada con el bloque V8 biturbo de 4.000 CC que genera una potencia de 550 CV y un par motor de 770 Nm, el cual se transmite a las cuatro ruedas a través de la caja de cambios automática de ocho velocidades, acelerando así hasta los 100 km/h en 4,6 segundos y alcanzando una velocidad máxima de 290 km/h.

Esta edición del Bentayga EWB ya es bastante exclusiva de por si pero ahora todavía más con el trabajo específico realizado por Mulliner. La historia de esta unidad en cuestión comenzó con la elección de su color que con la ayuda el director de diseño de Mulliner, Phill Dean, al final los dueños decidieron ir más allá con la elección de un azul eléctrico metálico brillante denominado Kingfisher como color principal y que se complementa con el techo y pilares en negro Onyx. A esto hay que añadir que es equipado con los paquetes Touring y Blackline, que añaden vidrios traseros tintados y molduras en color negro, para rematar con las llantas de 22 pulgadas también pintadas en el llamativo azul Kingfisher en combinación con gris oscuro.

Ya metidos en personalización, los clientes también se aventuraron con el interior y la tapicería tanto de los asientos delanteros como los traseros con especificación Airline Seat para los últimos, todos ellos tapizados en naranja Mandarin como color principal en combinación con el azul Imperial como contraste, mientras que para las molduras los clientes eligieron madera de Koa de poro abierto instalada en zonas como el tablero de instrumentos, la consola central o el interior de las puertas y, por último, los detalles en contraste corren a cargo del mismo azul Kingfisher del exterior presente en zonas como el volante, la palanca de cambios, los bordados de los asientos o las puertas.