Ajuste de tuercas para el Audi S4 TDI: más potencia y presencia por cortesía de ABT

Contra todo pronóstico, algunas marcas están apostando por concebir vehículos deportivos diésel, un maridaje que al fin de cuentas tiene más sentido del que parece. Audi, quien ya anunció hace unos cuantos meses la llegada al mercado de esta ofensiva, ha conseguido ir más lejos de la mano de ABT. Y es que el preparador alemán no entiende ni de combustibles ni modelos, puesto que su único objetivo es sacar a relucir el lado más deportivo de todo vehículo que visite sus instalaciones. Con esta premisa, ha sido ahora el turno del Audi S4 TDI para padecer importantes modificaciones.

Como viene siendo habitual, ABT aplica mejoras tanto estéticas como mecánicas, dos apartados mediante los cuales se ha exaltado al familiar de los cuatro aros. De esta forma, aquellos clientes que echen en falta un poco más de picante en la receta del Audi S4 podrán acudir al garaje del preparador teutón y solicitar una buena dosis de anabolizantes para este.

En una primera instancia, nos encontramos con modestos cambios a nivel estético pero capaces de marcar la diferencia. Los ingenieros de ABT han apostado por acoplar una nuevo suspensión, mediante la cual no solo se consigue mejorar el comportamiento dinámico del S4, sino también su estética al reducir la altura de la carrocería entre 14 o 40 mm. Por último, unas llantas de 20 pulgadas y diseño específico se posan en el lateral del familiar alemán para aportar un mayor nivel de exclusividad.

Sin lugar a dudas, las mejoras por parte del preparador son toda una declaración de intenciones. Y es que ABT ha querido hacer aún más hincapié en que los vehículos deportivos diésel son una buena apuesta para aquellos que busquen el equilibrio perfecto entre eficiencia, confort y diversión. No en balde y gracias a la casa teutona, se han podido exaltar esas características.

De serie, el Audi S4 recurre a un propulsor diésel V6 de 3.0 litros capaz de generar 347 CV y 700 Nm de par. Sin embargo, la intervención de ABT y de su kit de potenciación provoca que la potencia total del familiar alemán ascienda hasta los 384 CV y 760 Nm de par, cifras que se trasladan al asfalto con una aceleración de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos.

Sin lugar a dudas, estas mejoras son una excepcional oportunidad para que aquellos propietarios más petrolhead sientan unas prestaciones cercanas a las del todopoderoso RS4. De momento desconocemos si las motorizaciones gasolina volverán a familia S de Audi, pero, mientras tanto, ABT seguirá ofreciendo la posibilidad de mejorar los modelos diésel que se ofertan en la actualidad.