Temblad deportivos: el inminente Audi RS Q8 bate un nuevo récord en Nürburgring

Dejen paso a su majestad el Audi RS Q8, la variante más radical del SUV alemán que acaba de declararse como rey de reyes en Nürburgring. Y es que la firma de los cuatro aros ya puede abrir el Champagne y celebrar por todo lo alto el nuevo récord que ostenta su inminente vehículo deportivo. Aún son muchos los misterios que envuelven al RS Q8, un modelo que todavía no ha visto la luz de manera oficial pero del que ya intuimos diferentes aspectos, los cuales se confirman después de haber sido testigos de su magistral rodar sobre el asfalto del Infierno Verde.

Sin lugar a dudas, las prestaciones del SUV teutón han ayudado a que este nuevo récord sea posible, pero detrás de toda gran proeza se encuentra una mente pensante. Este puesto lo ocupa Frank Stippler, un piloto profesional de origen alemán que ha competido tanto en DTM como en el FIA GT de la mano de Audi entre otras modalidades.

Pese a las claras intenciones por parte de la marca de camuflar a su último retoño, podemos vislumbrar una serie de componentes muy reveladores. A nivel estético nos percatamos de la presencia de una aerodinámica mucho más trabajada, complemento fundamental para hacer que el RS Q8 destrone al Mercedes-AMG GLC 63s, quien reinó a sus anchas después de coronarse como SUV más rápido sobre el Nordschleife.

Al mismo tiempo, unos rasgos más agresivos definen ese carácter beligerante de los modelos RS y que también se percibe en el RS Q8 a través de su imponente frontal. A nivel interior son pocos los detalles que podemos apreciar más allá de un volante de Alcántara, el Virtual Cockpit específico de los modelos RS y una jaula antivuelco, componente que se suprimirá en la variante de producción pero que ha actuado como recurso para poder batir este nuevo récord.

Pero es el apartado mecánico la verdadera guinda de este suculento pastel alemán. De momento, Audi no ha hecho declaraciones sobre el corazón que habitará en las entrañas del nuevo RS Q8, pero teniendo en cuenta las sinergias del SUV de los cuatro aros con el Lamborghini Urus, podemos esperar que sea un V8 de 4.0 litros biturbo el encargado de animar a este con 650 CV y 850 Nm de par.

Sea como fuere, la firma alemana ha dado con la fórmula idónea para hacer que el RS Q8 pare el cronómetro en unos impresionantes 7:42.253 minutos. Con esta premisa, Audi no solo se sube al podio de Nürburgring, uno de los circuitos más exigentes del mundo, sino que también ha mostrado la capacidad deportiva de un SUV de gran talante.