¿Qué futuro le depara al Audi R8?

El Audi R8, uno de los superdeportivos más ilustres de los últimos años, se mantiene al pie del cañón pero, ¿qué futuro le depara? Creo que no es de extrañar que nos formulemos esta pregunta si tenemos en cuenta los tiempos que corren y las duras normativas anticontaminación que buscan fustigar sin piedad a todo coche que ose desobedecerlas. Con la llegada del downsizing y la sobrealimentación, son muchos los vehículos que han dejado atrás los motores de gran cilindrada en pro de otros más cuidadosos con el medioambiente, pero el Audi R8 sigue manteniendo el tipo pese las circunstancias.

Fue en el año 2006 cuando la marca de los cuatro aros revolucionó el mercado con la llegada de este superdeportivo, el cual, en una primera instancia, se comercializó con dos motores. Todo apuntaba a que esta misma estrategia se aplicaría sobre la segunda entrega del R8 al ofrecer también un propulsor V6 que ayudaría a equilibrar la balanza a su favor.

Sin embargo, la firma alemana descartó esta opción y en su lugar se centraron en el desarrollo de un restyling que garantizaba unas mejores prestaciones y un aspecto más moderno. Fueron muchos los que temimos por la integridad del V10 atmosférico que da vida al R8, pero Audi consiguió mantener la compostura y, por ende, a esta emblemático motor.

Para lograrlo, se tuvo que recurrir a diferentes medidas como un filtro de partículas, que si bien lastra la maravillosa melodía del diez cilindros, permite que se mantenga intacta su personalidad. Y es que el R8 consigue desarrollar en su última versión 620 CV y 580 Nm de par, cifras que lo catapultan hasta los 100 km/h en unos impresionantes 3,1 segundos, tiempo que se complementa con una velocidad máxima de 331 km/h.

No en balde, ya son varios los rumores que apuntan a que, por desgracia, no veremos una tercera generación del Audi R8. De hecho, su lugar podría ser ocupado por un nuevo superdeprotivo 100% eléctrico engendrado de la mano de la familia e-tron que está empezando a depositar su legado dentro de Audi, firma que ya ha mostrado una gran predilección por este tipo de mecánicas.

Sin embargo, puede que la combustión siga siendo una fiel aliada del R8, lo que permitiría que en un futuro siguiésemos siendo testigos de un superdeportivo animado por un motor más comedido pero fiel a sus principios. Sea como fuere, el Audi R8 permanecerá en nuestras mentes como uno de los mejores coches de todos los tiempos independientemente de cuál sea su futuro.