Los atascos cuestan a los españoles 1.000 euros anuales
Un estudio de la Comisión Europea ha estimado que las ciudades españolas más castigadas por los atascos, son Madrid y Barcelona. Pero más impactante es el coste de estos atascos para los conductores; 1.000 euros anuales y unas 33 horas al año que se pasan arriba del coche.
Los atascos son el gran problema de los conductores que usan el coche diariamente. A fuerza de acostumbrarnos a ellos, algunos los pasamos más fácilmente que otros, poniendo a prueba nuestro temple y nuestra paciencia. Pero ¿sabes cuánto puede llegar a perderse en los atascos que sufrimos todos los días en las grandes ciudades? Un estudio de la Comisión Europea nos arroja un poco de luz al respecto.
Los atascos en las ciudades españolas, cuestan unos 1.000 euros anuales a los conductores, de acuerdo al estudio mencionado. Por supuesto, cuanto más grande es la ciudad, más alta es la probabilidad de atascos, de modo que no es sorpresa que el estudio nos diga que Sevilla, Barcelona o Madrid son las tres ciudades con más tráfico. Pero además del coste anual de estos atascos, cada conductor soporta unas 33 horas al año en ellos, un dato que sí es sorprendente.
El coste de pasarse 33 horas al año arriba del coche en los atascos, no solo representa un alto gasto de combustible, sino que también repercute en las actividades laborales, en el tiempo perdido y en competitividad laboral. Pero el dato más increíble es que si sumamos todos los atascos europeos, se considera que en las carreteras europeas se registra a diario un atasco de más de 7.500 kilómetros.
Quienes más sufren los atascos son los conductores madrileños y los de Barcelona. Para ellos, y para los de otras ciudades de Europa, la CE propone que los horarios de trabajo sean más flexibles; que no todo mundo entre o salga de sus trabajos a la misma hora. Evidentemente, una sugerencia solo podrá cumplirse si las empresas acceden a ello y no todas están dispuestas a hacerlo.
En contrapartida, la CE ha propuesto el uso del transporte público o de la bicicleta, algo que debería lograrse con una gestión apropiada del transporte público, más carriles para bicicletas y una reglamentación que permita a los ciclistas circular de manera más segura, sin dejar de cumplir las normas de tráfico como todo mundo.
Vía | ABC
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