Aspark Owl, el superdeportivo eléctrico japonés que quiere batir el récord en Nürburgring

En el pasado Salón de París se presentó uno de esos conceptos de superdeportivos que esconden una serie de características con las que quieren formar parte de los mercados más exigentes. Se trata del Aspark Owl, el concepto que ha presentado una marca japonesa que tiene la intención de que en los próximos meses se hable profusamente de él. No hay todavía noticias de que este concepto eléctrico haya pasado a la línea de producción, aunque el equipo detrás del coche quiere hacerse notar.

Su intención es que el Aspark Owl se enfrente a uno de los circuitos más exigentes del mundo. Nürburgring recibe el nombre de Infierno Verde, y eso es por algo. Se trata de un recorrido duro que suele ser campo de pruebas de muchas marcas y que pone a prueba la resistencia y capacidades del modelo. También es un circuito abierto al público, que puede probar su coche en él o alquilar un modelo en concreto para poder moverse por él.

El actual récord de velocidad en Nürburgring para un vehículo eléctrico lo tiene actualmente el Nio EP9, aunque en ese caso se trata de un coche no homologado para su conducción en carretera, así que no juega en la misma categoría.

En el caso del Aspark Owl, hablamos de un coche homologado para su circulación por carretera y que utiliza un monocasco de fibra de carbono y el uso del carbono en varios puntos de la carrocería hace que tenga una buena relación entre peso y potencia, con un peso de 1.460 kg. El Aspark Owl utiliza cuatro motores eléctricos que ofrecen una potencia equivalente a unos considerables 1.150 CV y un par máximo de 883 Nm.

El NIO EP9 circula por Nürburgring y bate el récord de velocidad

Este superdeportivo que tiene tracción eléctrica y una autonomía de 465 km ha conseguido batir su propio récord en el Infierno Verde y el de otros coches

Con esas cifras y el peso no es raro que consiga una aceleración de 0 a 100 km/h en solo dos segundos y una velocidad máxima de 280 km/h. Faltará ver cómo aplica esos considerables registros en el trazado de Nürburgring, pero parece que ya tiene mucho camino hecho. La marca prevé que entre en producción en poco tiempo, aunque si quieres ser uno de los conductores que disfruten de él tendrás que darte prisa porque solo prevén fabricar 50 unidades. Estará listo en su forma definitiva en el salón de Dubái y tendrá un coste aproximado de 3,1 millones de dólares.