Así mejorará BMW el rendimiento y la eficiencia de sus motores
Las mecánicas del fabricante alemán BMW, además de por su potencia, son conocidas también por su capacidad para obtener unos consumos muy contenidos. BMW piensa que estos motores tienen margen de mejora y presenta unas nuevas actualizaciones en la gama Efficient Dynamics, tanto diésel como gasolina y en 3 y 4 cilindros.
Las mecánicas de BMW llevan años caracterizándose por ser de las más eficientes del mercado en la relación de energía obtenida por cada gota de combustible quemada. Ahora, el fabricante nos cuenta que continúa estudiando e investigando para reducirlos aún más en sus motorizaciones Efficient Dynamics.
Estas mejoras llegarán tanto a la gama de gasolina como a la diésel, con las remodeladas y mejoradas motorizaciones de tres y cuatro cilindros. No deberíamos tardar mucho en tener acceso a estas actualizaciones, ya que suponemos que aparecerán por primera vez en la nueva generación del BMW Serie 5, para posteriormente ir extendiéndose por la gama BMW y también por los modelos de MINI.
Como decíamos, el objetivo de la actualización de los motores Efficient Dynamics es el de reducir consumos, lo que repercute en los niveles de emisiones contaminantes que también se verían reducidos, y el nivel de ruido emitido, que al fin y al cabo también es contaminación, acústica, pero contaminación. Además de resultar ligeramente más eficientes que los Efficient Dynamics vistos hasta el momento, el fabricante, de paso, se permite el lujo de extraer unas prestaciones levemente superiores, ganando algún caballo extra y pequeñas dosis más de par motor.
Algunas de las soluciones utilizadas por BMW en sus motorizaciones de gasolina son la tecnología TwinPower Turbo, inyección directa de combustible sobre la cabeza de los pistones, el sistema Valvetronic que regula la alzada de las válvulas de admisión y el sistema Doble Vanos que se encarga de ajustar los tiempos de aperturas de las válvulas tanto en admisión como en escape. Tanto el turbo como el colector de escape forman parte del bloque motor. Por otro lado, la presión de combustible sube hasta los 350 bares.
Del mismo modo, en las mecánicas de gasoil, la marca alemana afirma que han sido capaces de reducir los consumos de sus motores y, por tanto, también las emisiones contaminantes, aprovechando también para conseguir unas cifras de energía levemente superiores. Los cambios llevados a cabo en las mecánicas diésel principalmente llegan de la mano de un nuevo dispositivo de recirculación de gases de escape (EGR) y el nuevo sistema de reducción catalítica selectiva (SCR), que gracias al fluido AdBlue inyectado, separa el NOx para convertirlo en nitrógeno y agua. La presión del sistema de inyección por raíl común también se ha visto aumentada.
Fuente | BMW
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