Así entiende Volvo la conducción autónoma

Daniel Valdivielso    @valdi92    5 octubre 2015     2 min.
Así entiende Volvo la conducción autónoma

Volvo siempre ha sido una de esas marcas pioneras dentro del panorama automovilístico mundial con claras apuestas por terrenos como el de la seguridad. Ahora, la firma sueca da un paso más y se posiciona como una de las referencias en la conducción autónoma, el futuro de la movilidad personal.

Volvo siempre ha sido una de esas marcas pioneras dentro del panorama automovilístico mundial con claras apuestas por terrenos como el de la seguridad.

Ahora, la firma sueca da un paso más y se posiciona como una de las referencias en la conducción autónoma, el futuro de la movilidad personal.

Está claro que el siguiente paso en un universo actual lleno de asistentes, de sensores, de cámaras y de avisos, es el inicio de la conducción autónoma. Es por eso que actualmente ya hay marcas que ofrecen sistemas de autofrenado, capaces de detectar potenciales situaciones de riesgo, tomando el control del vehículo de forma momentánea para evitar un hipotético accidente.

IntelliSafe Auto Pilot interface

Hoy Volvo nos muestra su particular visión y propuesta para la conducción autónoma. La marca será una de las primeras que comercializará vehículos con estas características, ya que en la actualidad ya tiene una flota de vehículos -concretamente XC90- con estos sistemas instalados, recorriendo grandes distancias a diario.

Para Volvo, la comodidad y la facilidad de uso son primordiales en este tipo de sistemas. Para ello, ha ideado un sistema con el que el conductor puede interactuar con dos simples dedos. En una hipotética situación en la que la conducción autónoma fuese posible -por ejemplo, un largo trayecto por autovía- el sistema advertiría al conductor de esta posibilidad.

IntelliSafe Auto Pilot interface

En ese caso, las levas situadas tras el volante toman un papel protagonista, avisando al conductor mediante destellos parpadeantes de que la conducción autónoma está disponible. En ese caso, no se tiene más que tirar de ambas levas con las dos manos, momento en el que la luz de las levas se torna fija para indicar al conductor que el control lo tiene ahora el coche.

Si por cualquier circunstancia el vehículo detecta que no va a poder hacer frente a la conducción independiente, avisará al conductor mediante indicaciones en la instrumentación. Iniciará, además, una cuenta atrás de 60 segundos, tras la cual el conductor deberá pulsar alguna de las levas para indicarle al coche que toma el control de la situación. Si no se lleva a cabo ese movimiento, el vehículo inicia una secuencia de detención segura hasta que el conductor responda y pueda hacerse caso de la conducción.

Fuente | Volvo


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