Así es cómo se entrega un flamante Ford GT y alegra el día a su afortunado dueño

Seguro que recordáis con gran emoción el día que fuisteis a recoger vuestro primer coche y las sensaciones que os produjo el olor a nuevo, el miedo a hacerle cualquier desperfecto y el paso a que se convirtiese en nuestro niño mimado. Esta misma sensación ha experimentado Jordan Maron, un joven americano que ha tenido la suerte de recibir uno de los superdeportivos del momento, el Ford GT. Por suerte -y por desgracia porque no es nuestro- Jordan ha documentado todo el proceso para deleitarnos con su última adquisición.

Debemos tener en cuenta que, por norma general, adquirir un superdeportivo implica tener un poder adquisitivo bastante alto, pero para conseguir un Ford GT necesitabas cumplir una serie de requisitos que abandonaban la simple idea de tener el dinero suficiente. Para cumplir el sueño de tener una unidad del deportivo americano era necesario haber sido dueño de uno de la generación anterior algo, de lo que no todo el mundo puede presumir.

Sin embargo, aunque la firma norteamericana no hubiera impuesto una serie de condiciones para adquirir un Ford GT, la exclusividad se mantendría de la misma manera ya que el paso de sus anteriores generaciones por el mundo del motor marcaron un antes y un después. De igual forma, estamos ante un coche que es mucho más que un nombre y eso lo demuestra con un impresionante y abrumadora puesta a punto.

Al mismo tiempo, la estética también acompaña al conjunto que ofrece el superdeportivo americano, puesto que nos encontramos con un diseño con líneas muy marcadas y musculosas, las cuales representan a la perfección el sendero que sigue el aire cuando este se cruza en el camino del Ford GT. Para conseguir esto, los ingenieros de la firma del óvalo han tenido que trabajar duramente para desarrollar una aerodinámica a la altura de las prestaciones, las cuales no desmerecen nuestra atención.

En el interior del nuevo Ford GT nos encontramos con un propulsor V6 sobrealimentado de 3.4 litros capaz de desarrollar 656 CV de potencia y 746 Nm de par, cifras más que suficientes para plantar cara a los titanes europeos. Gracias al alcance que ofrece su motor, el superdeportivo estadounidense es capaz de alcanzar los 100 Km/h en tan solo 2,9 segundos y una velocidad máxima de 348 Km/h.

Sin duda alguna, Jordan no va a pasarlo mal una vez que le haga el rodaje al Ford GT y, mientras tanto, cuenta con otras joyas en su garaje que le harán una espera mucho más amena. Esto se debe a que el youtuber tiene bajo su propiedad un Ferrari 458 Italia Spyder y un Mercedes C63 S AMG. Sin embargo y como es normal, Jordan Maron se ha olvidado durante todo el vídeo de sus otros superdeportivos y se ha centrado en enseñarnos hasta el último detalle de su reciente adquisición.