Aprende a viajar seguro con la caravana
Las vacaciones son ideales para coger el coche, la caravana y salir a conducir por las carreteras sin rumbo. Pero antes, tienes que hacer unas comprobaciones
Una de las posibilidades de pasar unas buenas vacaciones es coger una caravana, unirla al coche y comenzar a disfrutar de la carretera. Gracias a este complemento del coche se puede viajar sin problemas y parar a dormir en cualquier sitio, olvidándonos de contratar habitaciones de hotel. Es una opción que cada vez cuenta con más seguidores, aunque muchas veces, vemos como es complicado conducir con una caravana unida al coche.
Vamos a repasar unos cuantos consejos para conducir con una caravana o un remolque para barco, por ejemplo, que es muy similar a una caravana. El principal elemento de seguridad son los neumáticos. Hay que revisar el estado de las ruedas del coche que hará las veces de tractor, pero también los de la caravana. Si estos tienen una presión inadecuada o están desgastados, da igual que los del coche estén en perfecto estado, ya que harán que no se circule correctamente y pueden elevar tanto el consumo del coche como la posibilidad de sufrir un accidente.
Hay que llevar siempre en el coche los dos triángulos de emergencia, además de un chaleco para cada ocupante del coche. En varios países es obligatorio que todos los ocupantes lleven uno, y no solo el conductor. Es mejor llevar uno por cada uno de los ocupantes y evitar problemas.
A la hora de cargar el coche, hay que tener en cuenta la carga máxima del mismo, el tipo de enganche y la carga máxima útil del remolque. La colocación de la carga es importante para que no se cargue excesivamente el punto de enganche y el remolque se mueva correctamente y no exista la posibilidad de perder el control.
Hay que asegurarse de que funcionan todas las luces del remolque, como la de frenos. De nada sirve que todo esté correcto en el coche si el remolque, que es lo que se ve desde la parte trasera, no ofrece la información visual necesaria. La conexión eléctrica es importante y hay que tenerla controlada. Si no funciona una luz, hay que repararla antes de mover, cambiando la lámpara o comprobando dónde está el problema.
Hay que tener en cuenta que los neumáticos del remolque también pueden pincharse, por lo que hay que llevar una rueda de repuesto para esta contingencia. O, al menos, un kit reparador de pinchazos que permitan continuar circulando hasta que se pueda cambiar el neumático dañado.
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