310 CV y 657 Kg de peso: así es el Specter, el vehículo de calle más radical

Los deportivos de antaño se caracterizaban por ser rudos, toscos y agresivos, cuyo control solo estaba al alcance de unos pocos virtuosos del volante. Sin embargo, con el paso del tiempo este tipo de coches se han ido atenuando y ofreciendo una potencia bruta pero siempre con seguridad, gracias a todas las ayudas electrónicas que ofrece la tecnología actual. Pero en ciertas ocasiones, nos podemos encontrar con vehículos como el Specter, cuya filosofía está basada en todo lo que suponía un deportivo de la vieja escuela.

La empresa americana Specter Motor Works ha sido la encargada de darle vida a este radical vehículo. Para complementar la fabricación de este, han recurrido a Ford Performance con la intención de contar con su ayuda. Gracias a la colaboración de la firma del óvalo, el Specter cuenta en su interior con tecnología de Ford, algo que le permite ofrecer unas prestaciones aún más sorprendentes.

Estéticamente, nos encontramos con un vehículo completamente espartano, donde prevalece un gran trabajo aerodinámico sobre un chasis y una carrocería elaborada exclusivamente en fibra de carbono. Solo 11 centímetros separan al Specter del suelo, ayudando a que el paso por curva sea extraordinario. Pese a que el vehículo no es el ideal para realizar tareas del día a día, la firma se ha cerciorado en que sus ocupantes se encuentren lo más cómodos posible una vez sentados.

Esto lo consiguen con asientos ajustables manualmente, la opción de instalar un navegador y la presencia de una guantera para poder depositar nuestros objetos personales. Aunque la gracia de que el Specter sea legal en la carretera, está en que podemos llegar al circuito sentados en él. Pero debemos hacer especial hincapié en la versatilidad que ofrece el Specter pese a ser un vehículo tan radical y estar inspirado en la Fórmula 1.

Esto lo podemos ver reflejado en la suspensión que hace acto de presencia en el deportivo americano, la cual emplea un sistema de doble horquilla. Los amortiguadores permiten 324 posiciones diferentes y la marca ofrece la posibilidad de instalar una suspensión variable y utilizar diferentes modos de conducción. Pero, para darle sentido a este complejo sistema tan calibrado, es necesario un propulsor a la altura.

Es en este apartado donde ha intervenido Ford, puesto que la firma ha proporcionado al Specter dos motores. De serie, el radical deportivo cuenta en la parte posterior con un propulsor de 2.0 litros y cuatro cilindros capaz de entregar 252 CV. Sin embargo, aquellos clientes que sean aún más afines a las experiencias fuertes, tienen la posibilidad de instalar un motor de 2.3 litros y 310 CV, el cual deriva del Focus RS. Ambos corazones se encuentran asociados a una caja de cambios manual de seis velocidades.

Con un reparto de pesos de un 40-60, el Specter se presenta como uno de los vehículos más radicales y efectivos en circuito jamás fabricados. Pese a que está permitido circular con este deportivo por las carreteras americanas, su concepción está claramente enfocada al circuito, lugar donde sus afortunados dueños disfrutarán como nunca. Eso sí, el Specter se fabrica bajo estricto encargo.