La suspensión del DS 7 Crossback que se anticipa a la carretera

El Citroën DS representó un cambio sustancial en el año 1955 cuando fue lanzado al mercado, gracias a su suspensión hidroneumática que fue muy bien acogida y que con el paso de los años ha sido uno de los logros de este modelo más reconocidos. Y en el año 2017, unas cuantas décadas después, el DS 7 Crossback cuenta con una suspensión que también quiere ser un referente para futuras generaciones de conductores. El coche que ha elegido el presidente de Francia para su investidura tiene el DS Active Scan Suspension.

Esta suspensión va unida a varias tecnologías que permiten al coche anticiparse a la carretera y que gracias a ello puede adaptarse al camino que viene e incrementar la seguridad en el trayecto. El modelo va equipado con una cámara que tiene un alcance de 20 metros de distancia que detecta las irregularidades de la carretera por delante del coche y el sistema anticipa el comportamiento de la suspensión para adaptarse a esas imperfecciones.

La información obtenida por esta cámara para a una centralita que envía las instrucciones a cada uno de los cuatro amortiguadores que ejecutan las órdenes de manera independiente, consiguiendo que el contacto con el firme sea más efectivo en cada ocasión. Los datos obtenidos por la cámara tras el parabrisas se complementan con cuatro sensores que miden la estabilidad de la carrocería y tres acelerómetros que analizan el estado de la carretera y el comportamiento del vehículo en todo momento, teniendo en cuenta parámetros como la velocidad, el ángulo del volante y frenado.

Este modelo, el buque insignia de la marca gala de vehículos premium, tiene otras tecnologías a bordo para ir abriendo el camino hacia la conducción autónoma en un futuro muy próximo, como vimos en este artículo. El DS 7 Crossback Le Première ya se puede reservar en la página web de la marca, aunque su llegada no se producirá hasta el principio de 2018.