Así es el renovado Renault Scenic, ahora monovolumen no significa aburrido

Apenas unos días antes del inicio de una nueva edición del Salón de Ginebra, los chicos de Renault han sacado a la luz uno de sus productos más importantes.

Hablamos de la cuarta generación de Renault Scenic, su monovolumen compacto por excelencia y uno de los precursores de este segmento tan popular en Europa.

La historia de Renault Scenic arranca en el año 1996, cuando apenas unos meses después del lanzamiento de la primera generación de Megane, la firma gala recoge una creciente demanda de los usuarios, que buscaban más espacio para una familia cada vez más grande, sin necesidad de adquirir un monovolumen de gran tamaño.

La propuesta de Renault fue un éxito arrollador desde el primer momento, y ya son tres generaciones -casi 5 millones de unidades comercializadas- las que observan el alumbramiento de esta cuarta, que llega con un estilo completamente nuevo que pretende romper con el pasado para, nunca mejor dicho, convertirse en el exponente perfecto de los monovolúmenes del futuro.

Tras 5 millones de unidades vendidas, nadie duda del éxito y la popularidad de Scenic

Poco sabemos aún de la nueva generación a excepción de tres fotografías oficiales que ya pululan por la red desde hace unas horas. La marca ha sido muy comedida en sus informaciones y tendremos que esperar hasta el Salón para conocer a fondo todos los detalles técnicos y sus características interiores.

Nuevo Scenic ofrece un diseño muy cuidado que poco tiene que ver con el de su antecesor. Pese a ello, se le reconoce rápidamente como un Renault gracias a un frontal muy similar al de las últimas creaciones de la marca. El logo de gran tamaño copa buena parte del protagonismo, a lo que se une unos faros similares a los de Kadjar. Por supuesto, contarán con la firma lumínica LED marca de la casa.

Las líneas básicas de Scenic son una mezcla entre el superventas Captur y la nueva generación de Espace. Por primera vez en Scenic se ofrece un pilar A con superficie acristalada, una tendencia directamente extraída de Espace. Sin embargo, la parte trasera recuerda más a Captur gracias a la mayor cantidad de chapa.

Parece ser que el chasis acoge ahora una distancia entre ejes mayor, lo que redundará en un mejor aplomo en carretera y en mayor espacio interior. Como es lógico, los propulsores serán los mismos que monta la nueva generación de Megane, a la espera de confirmar la incorporación de las versiones más altas, lo que daría como resultado el primer «Scenic GT» de la historia del modelo.

Fuente | Renault