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Lexus GS 450h, prueba (Diseño exterior, interior y acabados)
Segunda parte de la prueba del Lexus GS 450h, berlina híbrida equipada con dos motores que juntos desarrollan 345 CV. En la segunda parte de la prueba repasamos el diseño exterior, el interior y la calidad de los acabados, así como el espacio que ofrece a los pasajeros o el tamaño del maletero.
Seguimos con la berlina GS de Lexus, concretamente con el GS 450h, es decir, la variante híbrida con 345 CV. En la primera parte de la prueba analizamos todo lo relacionado con las prestaciones y el motor de este GS, motor que combina un propulsor V6 gasolina con otro eléctrico con los que el GS 450h ofrece su lado más deportivo.
Ahora en esta segunda parte analizaremos el diseño exterior, el interior, la comodidad o el espacio que ofrece a los pasajeros. Aunque ya podemos adelantar, que el espacio no es un problema en el Lexus GS.
Diseño exterior
Líneas clásicas, berlina tradicional pero con pequeños toques que le imprimen un caracter diferente, personal y deportivo. Esa al menos es mi opinión sobre el GS, puesto que lateralmente vemos una berlina de grandes dimensiones de diseño tradicional, sin excentricidades.
Eso sí, frontalmente destaca la parrilla de grandes dimensiones trapezoidal -todo un signo de identidad en la marca-, una defensa delantera de corte deportivo (aunque con el acabado F-Sport aún se incrementa más la deportividad) y unos faros bixenon de serie.
Precisamente hablando de los faros, de serie son bixenon, pero en los siguientes niveles de acabado usan la tecnología LED para todas las funciones de iluminación. Lateralmente las formas son sencillas, elegantes y acordes con una berlina de este tamaño y segmento. Destacan las llantas de aleación de 18 pulgadas de serie.
La parte que más cambia con respecto al anterior GS es la zaga. Ahora se perfila mucho más el carácter de sedan y al mismo tiempo se opta por unos faros traseros -con tecnología LED- que parece que nos miran de forma desafiante. La línea cromada que los perfila también contribuye a esta sensación de diseño personal, y al mismo tiempo le infiere un estilo deportivo.
Diseño interior, acabados y habitabilidad
Por dentro lo más significativo es el espacio y el confort con el que premia a sus ocupantes. Empezando por unos asientos que más bien parecen butacas, con todo tipo de lujos, donde no falta la calefacción o la ventilación, además de estar tapizados en cuero microperforado.
La postura de conducción es cómoda, con buena visibilidad, además tanto los asientos delanteros como el volante, cuentan con ajuste eléctrico y memoria. Es una postura muy confortable para viajar, disponemos de todo tipo de ajustes para poner el asiento a nuestro gusto y en el puesto de conducción todo está a mano.
Atrás hay espacio suficiente para los pies, cabeza y para tres adultos sin ningún problema. Aunque claro, dos viajarán como auténticos jefes de Estado, además de disponer de reposabrazos en la plaza central, salidas de aire y de una amplia guantera. El que viaje en la plaza central se topará con un tren central elevado y el respaldo algo más duro que las cómodas butacas laterales.
El salpicadero destaca por la gran pantalla central de 12 pulgadas -de serie- y porque gran parte de los mandos se controlan desde el «ratón» del tren central. Al principio tardamos un poco en acostumbrarnos a todos los mandos, pero en unos días ya nos manejamos bien con el coche. Aunque sigue teniendo la misma pega que el RX, me refiero al botón del A/C, que para conectar o desconectarlo tenemos que usar el joystic central y no tiene un botón físico en el climatizador -algo básico-. El toque clásico en el salpicadero lo pone el reloj analógico.
La calidad de acabado es elevada y se nota en el uso de materiales nobles -como madera- o en los acabados de las puertas, donde no se ven plásticos duros o mal acabados. Aparecen zonas forradas en cuero, como la parte superior del velocímetro o el tren central, y en general unos acabados a la altura del precio y del apelativo premium.
Huecos y maletero
En materia de huecos y lugares para dejar nuestras cosas, el GS viene completo, ya sea en las guanteras de las puertas, en el amplio cofre central o la guantera principal. En las plazas traseras el reposabrazos alberga posavasos y dos guanteras, una de ellas amplia.
El maletero cuenta con una capacidad de 482 litros, algo menos que otras berlinas similares (Mercedes Clase E 540 litros) pero no podemos olvidar que las baterías restan espacio. Es un maletero con formas regulares y bastante aprovechable.
En la tercera parte de la prueba nos centraremos en hablar del equipamiento, sin olvidarnos del de seguridad y analizar aquellos elementos presentes en nuestra unidad de pruebas. Además también analizaremos los precios del Lexus GS y finalizaremos la prueba con nuestra valoración sobre el coche.
Fotos | Diego G. Moreira
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