Jaguar F-Type SVR, filtrado antes de tiempo con 575 CV

Es innegable que Jaguar está viviendo un momento dulce. Tras un 2015 plagado de lanzamientos, con unas cifras de ventas más que notables, se le presenta un 2016 cuanto menos movidito.

Apenas llevamos 20 días, y ya se ha dejado entrever la que será una de las estrellas durante el Salón de Ginebra, la versión más potente del F-Type, la SVR.

El F-Type ha sido para Jaguar una auténtica revelación, gracias a un éxito que posiblemente ni ellos mismos han previsto en ningún momento. El pequeño roadster biplaza -con su correspondiente versión coupé también de dos plazas- ha triunfado desde el primer momento, gracias a un diseño arrebatador y a unos motores muy potentes.

Ahora, los chicos de Jaguar han querido dotar a la gama del F-Type de un tope de gama con todas las de la ley, y para ello han recurrido al departamento de Vehículos de Operaciones Especiales del grupo Land Rover, dando como resultado lo que vemos en pantalla, el denominado como «F-Type SVR».

¿Qué tiene de especial el SVR respecto a sus hermanos de gama? Para empezar, se le ha querido dotar de una carrocería más agresiva y deportiva, que lo distinga de alguna manera de lo que hasta ahora conocemos como F-Type. Para ello, se le ha montado un paragolpes delantero con unas entradas de aire mayores, un capó con entradas de aire o unas llantas de aleación específicas en 20″.

Las llantas de aleación forjadas de 20 pulgadas son específicas para el SVR

No faltan tampoco otros aditamentos más «bestias», como las cuatro salidas de escape de titanio integradas en un difusor de carbono, o un alerón mucho más prominente que los actuales retráctiles de las versiones «normales». Se añaden también más colores para la carrocería, alguno de ellos específicos para esta versión.

En el interior, las modificaciones son mucho más reducidas, limitándose a unas nuevas molduras en aluminio cepillado y a unos asientos tapizados en cuero con formas más envolventes. El lujo sigue estando presente con un gran equipo de sonido, regulaciones eléctricas para todo o un completo pack de iluminación ambiental.

Mecánicamente los cambios son obvios. Se trata de la versión más potente, que toma el propulsor ya conocido 5.0 V8 sobrealimentado mediante compresor, ajustando su potencia algo más para conseguir aumentarla hasta los 575 CV. El par motor también asciende hasta los 700 NM. La transmisión, automática, sigue siendo la misma de convertidor de par de 8 velocidades, aunque sus leyes de funcionamiento se han revisado específicamente para esta versión.

No faltan tampoco la suspensión adaptativa, el diferencial trasero electrónico o el equipo de frenos carbonocerámicos. Las prestaciones son brillantes, con una aceleración de 0 a 100 km/h cifrada en 3.7 segundos y una velocidad máxima de 322 km/h para la variante cerrada y 312 km/h para el descapotable.

Vía | autovisie.nl