General Motors continúa con las llamadas a revisión de 8,5 millones de coches más en julio
El problema con la llave de contacto de varios modelos de General Motors fabricados desde 1994 hasta este mismo año continua dando problemas a la marca y provocando la llamada a revisión de millones de unidades, que está costando a la compañía muchos millones de dólares
El problema del contacto defectuoso de los coches de General Motors le va a costar muy caro a la compañía. Hemos comentado ya en alguna ocasión que durante el mes de junio se han visto afectados por esta llamada a revisión a muchos vehículos de la marca, pero el mes ha cerrado con otros seis requerimientos para comprobar el funcionamiento de varios modelos más.
Solo en Estados Unidos serán 7,6 millones de vehículos que tendrán que pasar por los talleres concertados de Estados Unidos para revisar el estado de la llave de contacto que tantos problemas está dando a la empresa. No es un problema ligero, ya que a causa de estos defectos de fabricación se han producido siete accidentes graves, con ocho heridos y tres fallecidos.
A nivel global, la cifra de coches reclamados para revisar asciende a 8,5 millones de unidades. Este problema parece estar resuelto en modelos más recientes y son los coches fabricados desde 1994 hasta principios de este año los que podrían sufrir este problemas. Se trata de un defecto en el contacto que provoca la desconexión del motor y en consecuencia, la pérdida de control del vehículo, que puede provocar un accidente.
Desde General Motors se ha reaccionado y se ha asegurado que está todo bajo control y que se está trabajando para minimizar los daños producidos por este fallo de diseño. En total son unos 25 millones de vehiculos revisados hasta el momento y un coste de 700 millones de dólares en las 54 campañas de seguridad realizadas hasta la fecha, aunque hay previstos 1.200 millones de dólares más para la segunda mitad del año.
Un desastre para las cuentas de la compañía que se están esforzando en solucionar con prisas y que podría desembocar en nuevos sistemas de control de calidad para garantizar que estos problemas no se vuelvan a repetir en un futuro. Algo que los usuarios de coches, tanto de GM como de otras marcas agradeceremos mucho.
Vía | Car Scoops
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