El Ford Mustang 2018 llegará a Europa y estos son los primeros datos que sabemos

La nueva gama del Mustang para Europa incorporará, con algo más de un año de desfase, la actualización que la sexta generación del Mustang ha recibido durante el primer trimestre de este año 2017 en el mercado norteamericano. Esta actualización le ha dotado con un nuevo frontal, aún más agresivo y afilado que el anterior, un nuevo capó delantero y unas ópticas de nuevo diseño que le aportan un aire aún más fiero al conjunto.

En las unidades destinadas a Europa se han incluido —para superar las homologaciones— unos nuevos deflectores y tres nuevos colores de carrocería: (Burgundy Velvet, Orange Fury y Kona Blue), así como las luces diurnas de tres barras LED de serie, que en el mercado americano se ofrecen como opción.

En el interior es donde los cambios son más importantes, pues para los mercados europeos la nueva instrumentación digital configurable será parte del equipamiento de serie, mientras que en los Estados Unidos este elemento es un opcional. Esto permitirá configurar diferentes versiones de acabado según las funciones integradas en la misma (como por ejemplo el launch control o el nuevo sistema de deslizamiento controlado de las ruedas en el arranque, entre otros). Con este nuevo cuadro digital, el conductor del Mustang podrá configurar a su gusto la información que recibe en el cuadro eligiendo la posibilidad que más le guste (tiene hasta tres diferentes por cada modo de conducción entre las que elegir).

Igualmente, para los mercados europeos el nuevo Mustang 2018 ofrecerá mejores calidades de acabado y materiales de mayor calidad, integrando una mayor presencia de plásticos mullidos (en la consola central y salpicadero) en vez de las habituales terminaciones plásticas rígidas que se ofrecen al otro lado del Atlántico.

El equipamiento del Mustang europeo también mejora al del americano. Contará con la más avanzada versión del Ford SYNC en sus sistemas de infotainment, así como con nuevas funciones avanzadas como la alerta de cambio involuntario de carril, el sistema de alerta pre-colisión, detector de peatones, sistema de aviso de distancia respecto del coche precedente y de frenada automática en ciudad. La seguridad no será un problema en el nuevo Mustang.

En cuanto a la mecánica, se mantienen los 2.3 Ecoboost (317 CV de potencia) y el potente V8 5.0 con nada menos que 421 CV cuyo envolvente sonido provocará más de un giro de cuello. Ford ha lanzado en Norteamérica opcionalmente un nuevo sistema de escape activo que permite «programar» donde y cuando dejar rugir el motor, que parece que se va a incluir de serie en los Mustang europeos. Para Europa estas mecánicas podrían incluir leves modificaciones en cuanto a la entrega de par, que también sería levemente superior a este lado del charco.