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El Ford Focus ST se desvela con un nuevo propulsor diésel
Ford nos presenta el restyling del Focus ST, la variante deportiva del compacto americano. El estilo se adapta a las nuevas líneas que el Focus presentó hace unos meses, con un interior también más agradable. Destaca la inclusión de un motor diésel de 185 CV dentro del acabado ST.
Ford, siguiendo con la actualización de su modelo compacto Focus, ha revelado la puesta al día de su versión más deportiva -hasta el momento-.
Hablamos del Focus ST, que ahora se ofrece con una imagen más personal, más llamativa, adaptando sus líneas de diseño al restyling del compacto americano.
El diseño exterior ha variado en la proporción en la que lo ha hecho el Focus «normal». Esto significa que el ST monta ahora un frontal más afilado, con una gran entrada de aire de una sola pieza, con una segunda entrada suplementaria en la parte inferior. Por supuesto, cambian también los grupos ópticos.
El lateral no sufre grandes cambios, limitándose a unas llantas de aleación de nuevo diseño, pero en la trasera sí distinguimos un portón con nuevas formas, unos pilotos ligeramente más pequeños y un paragolpes más deportivo, con molduras que imitan a una rejilla de ventilación. Mantiene la salida de escape central de angulosas formas.
En el interior, el rediseño se ha centrado básicamente en una mejora de la ergonomía del Focus. Ahora el salpicadero tiene menos botones, aglutinando más funciones que antes en una gran pantalla central, de dimensiones más que generosas. El climatizador cuenta ahora con mandos más fáciles de utilizar, así como el volante, también más accesible y menos sobrecargado de botones.
Uno de los puntos más importantes de este restyling son los motores, puesto que Ford ha decidido introducir una variante diésel dentro del acabado ST. El propulsor de gasolina se mantiene inalterado, sigue siendo el mismo 2.0 Ecoboost de 250 CV y 360 NM, capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 6,5 segundos y de alcanzar una velocidad máxima de 247 km/h.
La novedad llega de la mano del ST diésel, que no se distinguirá estéticamente de su hermano de gasolina. Montará un propulsor 2.0 TDCi con 185 CV y 400 NM, capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 8,1 segundos. Su consumo medio rondará los 4,5 litros cada 100 kilómetros.
Las primeras unidades del restyling del ST llegarán a los concesionarios a principios de 2015, mientras que los pedidos se aceptarán desde otoño de este mismo año.
Fuente | Ford
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