Ford Focus RS, con motor de Mustang y tracción total

Ford ha desvelado hoy el que se convertirá en uno de los Focus más radicales de la historia del modelo compacto.

Hablamos del Focus RS, que en esta tercera generación se carga de tecnología para añadir potencia, manejo y agresividad a uno de los compactos más rompedores.

Este modelo será el trigésimo en portar las insignias RS en su carrocería. El Focus RS se reedita en esta tercera generación del Focus, y llega con un diseño completamente renovado.
Por primera vez el Focus RS se construirá sobre una carrocería de 5 puertas, lo que ya en sí mismo supone una revolución dentro del modelo. Será, por tanto, el Focus RS más prácticos de cuantos hayan existido.

Las líneas exteriores no dan lugar a dudas, estamos ante todo un RS. El frontal es especialmente agresivo, con una entrada de aire bien grande que además está perfilada con un listón en tonalidad «azul RS», lo que le aporta más deportividad si cabe. Los antinieblas ocupan ahora una posición más extrema, y cuentan con orientación vertical. Los faros tintados de negro le dan un toque aún más agresivo.

La vista lateral es, tal vez, la parte menos llamativa del conjunto. Sin embargo, rápidamente salta a la vista que no es un Focus normal gracias a unas llantas de aleación de gran tamaño pintadas de antracita en cuyo interior distinguimos un equipo de frenos sobredimensionado. Además, «por el fondo» asoma un alerón de lo más…interesante.

Hablando del alerón, situado sobre el portón del maletero, nos hace recordar a aquellos Cosworth de antaño con aquellos alerones interminables, tan personales y llamativos. Además, el paragolpes trasero cuenta con un difusor plenamente funcional del que salen dos salidas de escape ovaladas de gran tamaño que, a buen seguro, emitirán un sonido «puro RS».

Del interior, cabe destacar la incorporación de asientos Recaro, placas identificativas del modelo y una instrumentación exclusiva que contruibuirán a crear una atmósfera racing muy interesante en un modelo de este enfoque.

El propulsor es otra de las novedades. Atrás queda aquella magnífica unidad 2.5 pentacilíndrica de origen Volvo que tantas alegrías le ha dado a Ford. En esta tercera generación, el encargado de mover al Focus RS será el nuevo motor 2.3 Ecoboost de cuatro cilindros que ya conocemos del Mustang. En este modelo ofrecerá 330 CV, lo que unido a una transmisión manual de 6 velocidades, asegura unas prestaciones de infarto.

A esas prestaciones contribuye también la incorporación de un nuevo sistema de tracción integral -será el primer Focus en disfrutar de ello- que asegura que la fuerza se traslade de forma fiel a la carretera. Este sistema distribuirá, en condiciones normales, un 70% de la fuerza al eje trasero, aunque podrá variar hasta entregar el 100% de la potencia a un sólo eje en determinadas circunstancias. El Focus RS acelerará de 0 a 100 km/h en menos de 5 segundos, lo que le convierte en el Focus más rápido hasta la fecha.

Fuente | Ford