Los clientes europeos empezamos a pasar de los coches diésel

En los últimos años lo más habitual era ver como los vehículos propulsados por motorizaciones de gasoil arrasaban en ventas respecto a los vehículos de gasolina. Todos nos pensábamos que un coche diésel, pese a que era un poco más caro de adquirir, nos saldría rentable por su menor consumo de combustible y el inferior precio del gasoil respecto a la gasolina.

El CO2 contribuye al efecto invernadero, pero no es tóxicoAdemás, como la cifra de emisiones de CO2 era ligeramente inferior, los gobiernos ayudaban a los ciudadanos a la compra de este tipo de vehículos y a reducir el precio del gasoil. Sin embargo, sólo se fijaban en el CO2, que es un gas que contribuye al efecto invernadero pero no es tóxico, olvidándose de las emisiones de otros gases que deberían ser tanto o más preocupantes que el propio CO2.

Ahora, parece ser que los ciudadanos de a pie nos damos cuenta de lo sucios que son los propulsores de gasoil por las medidas restrictivas en muchas ciudades importantes a nivel europeo. Esto, sumado al mayor número de impuestos a pagar por un diésel, junto a los contenidos consumos actuales de los modernos motores de gasolina están cambiando la mentalidad del pueblo europeo. Aunque en España, como siempre, necesitamos un mayor margen de tiempo para asimilarlo.

En lo que llevamos de año, el porcentaje de ventas de vehículos de gasoil se ha visto reducido en Europa Occidental. En el mes de abril, la caída fue de un 3,1 %, dejando a este tipo de vehículos con una cuota de mercado inferior al 50 %, un 49, 7 % concretamente.

Por segmentos, los coches que más ventas de motorizaciones de gasoil perdieron en favor de mecánicas de gasolina o combustibles alternativos fueron los compactos, los subcompactos (segmento B) y los monovolúmenes pequeños. Las matriculaciones de vehículos urbanos de gasoil se mantuvieron estables, pero este segmento nunca se ha caracterizado por un gran volumen de ventas de mecánicas de gasoil.

Los coches de grandes dimensiones tipo ejecutivo (berlinas de gran tamaño) están representadas en torno al 80 % por mecánicas diésel. Este dato también se ha reducido, aunque levemente.

En nuestro país, los datos del pasado mes de abril nos arrojaron una cuota del 56 % para coches de gasoil, mientras que en el acumulado de 2015 fue de un altísimo 63 %.

Si estás pensando en comprarte un coche piensa que igual no es muy recomendable que lo adquieras diésel. Echa números teniendo en cuenta que, aunque el combustible es ligeramente más barato y su mecánica gasta un poco menos, pagarás más por el vehículo, los impuestos serán mayores y tu ciudad será un poquito más sucia por tu coche.

Vía | AutomotiveNews