Los Porsche 911 sobrealimentados ya están aquí: 911 Turbo y 911 Turbo S

El año del 50 aniversario de su lanzamiento, el 911 da la bienvenida a las que siempre son las versiones más deseadas, las sobrealimentadas. Estamos hablando, obviamente, de los 911 Turbo y Turbo S.

La generación 991 acaba de recibir las variantes más prestacionales hasta la fecha, con potencias de 520 y 560 CV, que marcan nuevos límites (si es que una marca como Porsche los tiene) de rendimiento y eficiencia, de dinámica y placer de conducción.

Las variantes Turbo y Turbo S del 911 estrenan una carrocería más ancha que las versiones «normales», exactamente 28 mm más que las versiones equipadas con tracción total. Los 911 Turbo y Turbo S son los primeros en equipar un sistema de aerodinámica activa que implica tanto la parte frontal, como la trasera, consiguiendo en total hasta 140 kg de apoyo aerodinámico gracias a los spoilers desplegables tanto delante como en la parte de atrás.

Este nuevo sistema de gestión aerodinámica, llamado por la marca PAA (Porsche Active Aerodinamics), es plenamente adaptativo, es decir, que de la misma manera que no vamos a conducir nuestro Turbo siempre por ciudad ni siempre por circuito, los sistemas aerodinámicos son capaces de «leer» las circunstancias de conducción en tiempo real y plegar o desplegar los alerones en consecuencia.

Las variantes Turbo y Turbo S se podrán distinguir de sus hermanos de gama por detalles como las llantas de nuevo diseño, una parte frontal con entradas de aire más grandes y agresivas, y una trasera más ancha y contundente gracias a un nuevo difusor inferior que integra cuatro salidas de escape de formas cuadradas, características específicas de las variantes sobrealimentadas.

Una de las bases de los modelos Turbo en los 911 es su motor. Porsche lo sabe, y no decepciona a nadie montando un nuevo propulsor de 3,8 litros con la clásica arquitectura de 6 cilindros bóxer, al que se le han añadido dos turbocompresores de geometría variable que le permite evitar el típico «agujero del turbo» propio de los motores sobrealimentados mediante turbinas. Además, este motor también equipa sistema de admisión por expansión y VarioCam Plus, tecnologías que Porsche lleva mucho tiempo perfeccionando y que le permiten ofrecer toneladas de potencia y par (520 CV y 660 NM para el Turbo, y 560 CV y 700 NM en el Turbo S).

Los vehículos que además equipen el sistema opcional Sport Chrono Plus ofrecerán también la función Overboost, que proporciona más fuerza al vehículo (710 NM en el Turbo y 750 NM en el Turbo S) durante un breve lapso de tiempo. Semejantes cifras le permiten alcanzar los 100 km/h desde parado en 3,2 segundos (3,1 en caso del Turbo S), llegando a parar el velocímetro en 315 km/h en el Turbo, y 318 km/h en el Turbo S.

Todas estas cifras tan bestiales de rendimiento y potencia no serían nada para Porsche si no fuesen capaces de combinarlas con unos consumos muy reducidos, y en estas variantes lo han conseguido con creces, parando el contador de consumo medio en 9,7 litros a los 100 km en ambas versiones, reduciendo las emisiones de CO2 un 16%. Este gran rendimiento global es posible gracias a la utilización de sistemas como el Start-Stop o la función de navegación a vela de la caja de cambios PDK de doble embrague y 7 relaciones.

Esta potencia no es bienvenida en Porsche si no pueden trasladar cada caballo y cada newton de fuerza al asfalto, y lo han logrado gracias al sistema de tracción integral, junto con las estabilizadoras activas que anulan o reducen e balanceo de la carrocería al mínimo (sus siglas son PDCC), sistema que se equipa de forma conjunta con el sistema de suspensión activo PASM. También se ofrece de forma opcional en el Turbo y de serie en el Turbo S el sistema de frenado con discos carbocerámicos PCCB, toda una garantía si hablamos de Porsche y sus sistemas de frenado.

El interior de los nuevos 911 Turbo combina los materiales más exclusivos como la piel y la fibra de carbono para crear un ambiente propio de los 186.000 euros que la marca pide por el 911 Turbo y que puede ampliarse hasta los 223.000 € si se elige el Turbo S. Las dos variantes equipan backets forrados en cuero junto con un volante deportivo con grandes levas de aluminio, que permiten al conductor no distraerse ni un momento de la placentera tarea de pilotar semejantes máquinas.

En definitiva, los 911 Turbo consiguen posicionarse otra vez como la más absoluta referencia entre los superdeportivos más exclusivos, aunando todo lo que una persona aficionada al motor desearía.

Fuente | Porsche