Suzuki se pasa a los 48V en sus nuevos Mild-Hybrid

La gama Suzuki contará con nuevas versiones con etiqueta ECO de la DGT para el Vitara, el S-Cross y el Ignis, gracias a una nueva tecnología Mild-Hybrid de 48V.

Todo suma con el objetivo de reducir emisiones de C02 y mejorar la media para cumplir con los objetivos que marca la UE. Y de paso, los clientes se benefician de coches con menores consumos… y de las ventajas de la etiqueta ECO, en el caso de las nuevas versiones que Suzuki prepara para 2020.

Uno de los medios que van a permitir seguir reduciendo emisiones es la tecnología Mild-Hybrid. La marca japonesa, que actualmente ofrece versiones Mil-Hybrid basadas en sistemas de 12 voltios para los Suzuki Ignis y Suzuki Swift, acaba de anunciar que a partir de la próxima primavera contará con un nuevo motor de gasolina denominado K14D Boosterjet, que en este caso utilizará un sistema Mild-Hybrid de 48 voltios.

Vitara, S-Cross y Swift Sport con etiqueta ECO

Este nuevo motor, que sustituirá al actual 1.4 Turbo, se montará en el Swift Sport, en el Vitara y en el S-Cross. Suzuki ya anuncia reducciones de consumo de un 15% según el ciclo WLTP, con unas emisiones de CO2 un 20% inferiores.

Suzuki S-Cross

Frente al sistema de hibridación ligera SHVS de 12 voltios que la marca utiliza desde 2016 en el Ignis y en el Swift, el nuevo sistema de 48 voltios apenas añade 15 kg de peso adicional al vehículo. Está compuesto por una batería de iones de litio, un motor eléctrico IGS que funciona como motor de arranque y como alternador, y un convertidor de corriente continua de 48 a 12 voltios.

Tanto la batería como el conversor están situados bajo los asientos delanteros. El ISG, conectado al motor mediante una correa, también asiste al motor de combustión al arrancar o al acelerar fuerte, con un par máximo de sistema de 235 Nm desde 2.000 rpm. Entre las nuevas ventajas del sistema de 48V destaca una función que permite remplazar la inyección de combustible con el motor eléctrico cuando el motor de combustión funciona al ralentí y el embrague no está conectado.

Permite mantener el motor al ralentí a velocidades inferiores a unos 15 km/h y cuando está parado, manteniéndose listo para volver a acelerar si se solicita, sin que se produzca retraso por el rearranque del motor, mejorando así el rango de entrada en funcionamiento del start-stop.