Nuevo Renault Clio 1.3 TCe 130 CV RS Line: deportivo para todo

Un motor potente y poco gastón, cambio de doble embrague, acabado deportivo y un chasis bien pusto a punto, un interior amplio y confortable… el Clio 1.3 TCe 130 CV en este acabado RS Line lo tiene todo.

Cuando acudimos a la presentación internacional del nuevo Renault Clio 2020, pudimos ensayar más a fondo la versión con el motor más novedoso, el 1.0 de tres cilindros con 100 CV. Aquí tienes la prueba de la nueva gama Renault Clio, donde analizamos todo lo que cambia el utilitario francés, la oferta mecánica, las versiones que vendrán en el futuro y, especialmente, el motor intermedio de 100 CV. Y aquí te contamos los precios y la configuración de la gama Clio 2020.

En esta ocasión, y en el marco de la presentación nacional del coche, vamos a centrarnos en la variante que menos pudimos conducir del nuevo Clio en la presentación internacional: el 1.3 TCe de 130 CV, para el que hemos elegido el apetecible acabdo RS Line.

Un motor que anda mucho y gasta muy poco

El 1.3 TCe de 130 CV es un motor ya conocido en Renault. Se utiliza en los Mégane, Captur, Scénic y Kadjar, sin ir más lejos.

Para el Clio, llega en una configuración de potencia de 130 CV, con 240 Nm de par, y monta ya filtro de partículas de gasolina. Está asociado en exclusiva a la caja de cambios de doble embrague EDC con 7 marchas, que incluye levas en el volante de serie. No es, en absoluto, una mala idea, con lo bien que va este cambio. Aunque puede que haya quien eche en falta la caja de cambios manual.

Pero será más por acceder a un precio de salida más bajo que por otra cosa, porque la caja EDC en ningún momento hará que te acuerdes de pedal del embrague o de mover la palanca «a mano».

Las cifras del Clio 1.3 TCe nos permiten hablar de un coche con cierto carácter, que puede hacer honor sin problemas a la apariencia deportiva del acabado RS Line, disponible también para el motor de 100 CV. Acelera de 0 a 100 km/h en 9 segundos, y anuncia una velocidad punta de 200 km/h.

Una vez en marcha, este motor muestra suavidad de respuesta y un gran margen de utilización. Empuja bien desde bajas vueltas, y sube de régimen de forma muy lineal y son «rechistar». El sistema Multi-Sense, de serie, premite elegir entre cuatro programas que, si bien no están muy diferenciados entre sí en cuanto a la respuesta de la dirección, del cambio automático o del acelerador, sí se notan lo suficiente para elegir si quieres gastar poco o disfrutar en tu carretera de curvas favorita.

Además, Multi-Sense cambia también el funcionamiento de la climatización, el sonido del motor (no es un escape activo, es sonido sintetizado a través de los altavoces), la presentación del cuadro de instrumentación digital y la iluminación interior. Pero hace una cosa más que sí afecta al comportamiento dinámico: frenar de forma selectiva la rueda interior a la curva para inducir un efecto de giro que inscribe al coche en la trayectoria y mejora la agilidad.

El Clio 1.3 TCe RS Line también es un buen amigo de los viajes largos. La sensación de coche seguro, estable y aplomado en carreteras rápidas o en autopista recuerda a coches del segmento superior. Y como este acabado RS Line no incluye un ajuste más duro de la suspensión, que ya de por sí es firme, tampoco se compromete el confort de marcha.

Y es que para el nuevo Clio, en Renault han optado por realizar los reglajes de suspensiones en función de cada motor, no del acabado. Por ello, al conducir el Clio 1.3 TCe RS Line apenas notarás diferencias con un acabado Zen, más allá de las que puedan derivarse del equipo de llantas y neumáticos que lleva uno y otro.

Por último, un primer apunte sobre el consumo, a falta de una prueba más a fondo. Porque conviene destacar lo poco que gasta este Clio 1.3 cuando lo utilizas en modo «ECO» y cuidas un poco el pie derecho. Puedo adelantarte que incluso en ciertos recorridos y usos, llega a gastar menos que el 1.0, menos potente, con el que puede se necesario exprimir más el cambio, al tener solo tiene 5 marchas y mucho menos empuje que el 1.3.

La cifra, que la estás esperando: 6,5 l/100 km de media en un recorrido en el que pudimos medir parciales rozando los 6 litros (cruceros de 110-120 km/h), si bien apenas condujimos por ciudad. En carreteras viradas, y si le pides «marcha», tampoco es de los motores de su categoría más sedientos.

Equipamiento de serie del Renault Clio RS Line

Unos 1.675 euros más es lo que cuesta el Clio con acabado RS Line respecto al anterior escalón en la gama, las versiones Zen. Y está disponible tanto para el motor de 3 cilindros y 100 CV como para el 1.3 TCe de 130 CV.

Si buscas imagen deportiva, es totalmente recomendable incluso para el motor «pequeño». Ten en cuenta que en este precio incluyes todo lo que atañe a la decoración más deportiva RS Line tanto exterior como interior, incluyendo las llantas de 17 pulgadas RS Line, así como los asientos y pedalier deportivos.

Pero suma y sigue. El RS Line añade la ayuda al aparcamiento delantera y trasera, lunas traseras oscurecidas, cámara de visión trasera, el sistema Multi-Sense con los cuatro modos de conducción y el sistema multimedia Easy-Link, con pantalla de 9,3 pulgadas, navegador compatible con Android Auto y Apple CarPlay y equipo de audio de alta calidad con 6 altavoces.

Equipamiento opcional: ¿cómo mejorar el Clio RS Line?

Entre los equipamientos opcionales, lo más interesante si quieres mejorar el Clio RS Line es la rueda de repuesto en vez del kit antipinchazos (82 euros), el cargador de inducción para teléfonos móviles (82 euros) y el pack Driver (165 euros), que incluye freno de mano eléctrico y consola central regulable longitudinalmente con hueco porta-vasos.

No tan necesarios, pero ahí los tienes, existen otros dos packs adicionales. El paquete premium de asistentes al aparcamiento cuesta 455 euros, e incluye aviso de ángulo muerto, cámara 360 grados y ayuda asistida al aparcamiento delantero y trasero. Y el paquete de navegación Premium Bose RS Line tiene un precio de 250 euros, incluyendo aquí el sistema Easy Link con pantalla de 9,3 pulgadas.

Mientras que en los acabados Intens o Zen del nuevo Clio puedes recurrir a la personalización del coche con los paquetes exteriores Look (290 euros), o los interiores en naranjan o gris en el caso de los Zen (125 y 165 euros, respectivamente), el RS Line viene «a tope».

Únicamente podrás gastarte 41 euros si quieres la iluminación LED interior en las plazas delanteras y traseras. O lo que cuestan los acabados de pintura especiales para la carrocería que oscilan entre 413 y 495 euros. De serie la pintura sin coste es el blanco glaciar. Puedes elegir entre los sugerentes marrón visón, gris platino, naranja Valencia, negro brillante y dos tonos de azul.

El precio y los rivales del Renaut Clio 1.3 TCe RS Line

El precio de venta al público del Clio 1.3 TCe RS Line de 130 CV con cambio EDC de doble embrague es de 21.394 euros, incluyendo los descuentos que actualmente ofrece la marca.

Dentro de su gama, la diferencia con el motor de gasolina de 100 CV y cambio manual es de 2.697 euros, que nos parece razonable para la diferencia de prestaciones y sensaciones al volante que ofrece uno y otro. Aunque eso no quita para que, considerando su potencia, el 1.0 de 3 cilindros nos haya sorprendido más que este 1.3, al ofrecer mucho más de lo que esperábamos.

En cuanto a posibles alternativas, ya contamos en la prueba del Suzuki Swift Sport que es uno de los utilitarios deportivos con mejor relación entre precio y diversión al volante del mercado. Su precio está ligeramente por encima de los 19.000 euros con los descuentos actuales, recuerda, con cambio manual.

Otras opciones serían un Seat Ibiza 1.0 TFSI DSG de 115 CV con acabado FR, que cuesta 21.140 euros. Lleva cambio DSG, pero el motor no es tan potente como el del Clio. Mucho más asequible, y no por ello menos divertido, ojo al Ford Fiesta ST, en su versión 1.0 de 140 CV, que con descuentos no llega ni a los 18.000 euros.

Galería de imágenes Renault Clio 1.3 R.S. Line