Mercedes-AMG GT S Roadster; 522 CV para descubrir España a cielo abierto

El nuevo Mercedes-AMG GT S Roadster ya ha llegado a nuestro país para quedarse. Ofrece 522 CV de potencia y 670 Nm de par motor máximo… ¿Se puede pedir más?

El Mercedes-AMG GT S Roadster se ha convertido en el nuevo miembro descapotable de la familia AMG GT. Este nuevo cabrio cuenta con un consumo combinado de entre 11,5-12,2 litros/100 km y unas emisiones de CO2 de 262 g/km.

Este nuevo modelo se ha convertido en el noveno miembro de la familia de altas prestaciones. Según el propio fabricante, «con esta última incorporación, la familia AMG GT queda conformada por nueve miembros en el mercado español: tres Coupés de dos puertas, tres Roadsters y tres Coupés de cuatro puertas».

Los ingredientes que hacen especial a este nuevo integrante de la casa de la estrella son la combinación de un bastidor de aluminio ligero tipo spaceframe, un motor V8 biturbo, una transmisión de doble embrague de siete velocidades, un diferencial y una suspensión deportiva de doble horquilla.

Mercedes-AMG GT S Roadster, una nueva bestia anda suelta

Este modelo se sitúa como el roadster de acceso a la gama AMG GT con un precio que parte de los 198.000 euros.

Tal y como asegura la propia marca alemana, «el nuevo Mercedes-AMG GT S Roadster se incorpora a la gama de vehículos AMG como modelo de acceso entre los Roadsters de AMG GT disponibles en el mercado español. En comparación con el AMG GT Roadster, no disponible para este mercado, el AMG GT S Roadster se vuelve aún más dinámico por numerosas modificaciones en el motor, la suspensión, los frenos, el diseño y el interior. Por encima del AMG GT S Roadster se sitúan las dos variantes más prestacionales: el AMG GT C Roadster y el AMG GT R Roadster«.

El motor V8 biturbo AMG 4.0 litros montado en el AMG GT S Roadster ofrece una potencia de 522 CV y un par máximo de 670 Nm. Está disponible en un amplio rango de revoluciones del motor que va desde las 1900 a 5000 rpm. «La unidad de potencia de ocho cilindros ofrece un rendimiento contundente en todos los rangos de revoluciones del motor, combinado con una alta eficiencia para un bajo consumo de combustible y niveles de emisiones. Un sprint desde parado hasta alcanzar los 100 km/h se realiza en 3,8 segundos a los mandos de este descapotable, con una entrega de potencia capaz de propulsarlo hasta una velocidad máxima de 308 km/h».

La división deportiva de Mercedes-Benz ha añadido que «los dos turbocompresores del V8 no están ubicados en el exterior de las dos bancadas de cilindros, sino en el interior de la «V» que forman. Ventajas: un diseño de motor compacto, respuesta espontánea de los turbocompresores y bajas emisiones de escape gracias al flujo de aire óptimo hacia los catalizadores cercanos al motor. La lubricación mediante cárter seco también asegura el suministro de aceite incluso con fuerzas laterales altas y permite que el motor se instale más bajo, situando así el centro de gravedad más cerca de la carretera mejorando la estabilidad».

La transferencia de potencia se basa en la combinación de un motor central delantero y la transmisión deportiva AMG SPEEDSHIFT DCT 7G situada en el eje trasero y conectada con el motor mediante un tubo de torsión de alta rigidez. La compañía ha querido apuntar que «la distribución del peso es ideal para una conducción dinámica óptima con un reparto del 47 % en el eje delantero y 53 % en el trasero».

¿Qué características tiene la gama AMG GT Roadster?