Limpia los faros de tu coche con pasta de dientes
Puede parecer absurdo pero utilizar pasta de dientes como remedio casero para limpiar los faros de tu coche, dará resultados increíbles.
Los faros son uno de los elementos más importantes del coche en lo que a seguridad se refiere. Sin ellos, circular por la noche sería completamente imposible. Un correcto mantenimiento de los mismos es imperativo y hoy te enseñamos la forma más económica que existe de llevarlo acabo.
Es importante asegurarse que las luces funcionan de manera correcta así como también lo es hacer una revisión de los grupos ópticos que envuelven a esta pieza.
Con el paso del tiempo, los faros tienden a generar cierta neblina y en algunos casos, un color amarillo muy molesto, que otorga al modelo un aspecto descuidado y «viejo». Esta neblina, además, reduce la efectividad de iluminación, procurando situaciones más peligrosas en carretera.
Si esto sucede, la solución que la gente suele tomar es cambiar los faros. Existe sin embargo una situación todavía más económica, pulirlos. Antes de hacer esto sin embargo, la opinión de un profesional de taller sería interesante, ya que es posible que la pieza haya sufrido tantos daños que su sustitución sea inevitable.
Si el deterioro de los faros no es muy pronunciado, podemos utilizar pasta de dientes, limpiacristales y papel de cocina. Un remedio casero que irá de maravilla.
Para realizar la tarea, primero aplicaremos la pasta de dientes sobre los faros frotando en círculos con el papel. Es posible que tengas que repetir la operación más de una vez. Tras esto sólo tendríamos que aplicar limpiacristales y utilizar otro papel para limpiarlo.
De este modo conseguiríamos aportar a los faros un aspecto sobervio y retomaríamos su funcionalidad sin ningún tipo de problema.
Si queréis aportar un extra de protección a la pieza, lo único que tendrías que hacer es aplicar una capa de barniz transparente especial.
Como puedes ver existen múltiples opciones para ahorrar dinero para con el mantenimiento de nuestro vehículo. Esperamos que este útil truco te haya servido y que a partir de ahora puedas presumir de contar con unos faros relucientes, eso sí, ¡no nos deslumbres!
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