Jay Leno incorpora un escape de titanio en su Ford GT

Llega el fin de semana, estamos ávidos de recuperar la alegría por vivir emociones fuertes fuera de nuestros domicilios y, hasta que concluyan las 4 fases de la desescalada, la ilusión por entrar una ‘nueva normalidad’ condicionada por el maldito virus SARS-CoV-2 deberá contenerse mediante pequeñas dosis que generen sonrisas de oreja a oreja y latidos cardíacos a ritmo del movimiento sincrónico y armonizado de los pistones de un motor de 8 cilindros en disposición de V.

Aunque si se trata de un bloque V6, como el del Ford GT, tampoco es para hacerle ningún feo. Ni mucho menos. Es más, si se trata del coche de un entusiasta y ‘friki’ de la mecánica y de la restauración como es Jay Leno, la cosa pinta aún mejor y, como sabemos de sobra, que el bueno de Jay mima a sus coches, pues el subidón de adrenalina puede llegar a niveles que pongan en alarma un estado pero alterado de la consciencia.

Sea como fuere, en la entrada correspondiente al mes de abril, Leno repasa la actividad de su colección incluyendo las últimas novedades que atañen a sus tesoros en pleno proceso de restauración

Entre ellas, en la casi media hora de vídeo que merece ver de principio a fin, dedica una buena parte a su Ford GT y a la última actualización que ha incorporado.

Ponte tus mejores auriculares y disfruta

Con un nuevo escape realizado en titanio de alta calidad y manufacturado por el especialista  Heffner Performance Team, cuyo CEO, Jason  Heffner, actúa como poniente y comercial a cerca de las bondades de este sistema de expulsión de gases permite una reducción más que significativa del peso respecto del original, en nada más y nada menos que 13,6 kg ya que, en sí mismo, marca en una báscula una cantidad prácticamente irrisoria para un escape de tan solo 2,36 kg.

Además de lograr una cura de adelgazamiento radical y sin repercusiones negativas en un coche orientado al uso en circuito pero con homologación para circular por carretera ordinaria, el sonido, perdón, bramido del Ford GT se acentúa de manera espectacular.

Un cambio de escape que, a priori y viendo las imágenes y explicaciones de  Heffner, es una operación realmente sencilla de hacer, casi factible de realizar  con poco esfuerzo en el garaje de ‘tu casa’, siempre y cuando tengas la suerte de ser propietario de uno de estos coches de ensueño y tengas los más de 5.000 dólares que puede costar esta ‘chuche’ a los que añadir otros 1.200 que cuesta el recubrimiento anticalórico que el fabricante también ofrece en su página web.

Sea como fuere, además de invitarte a ver el último vídeo de Jay Leno en su totalidad, no dejes de disfrutar de algo que los coches eléctricos nunca podrán ofrecer: el rugido de un motor quemando carburante por el mero hecho de producir una melodía que emociona y asusta a partes iguales.