Jaguar pone a prueba su primer coche 100 % autónomo

Un Range Rover Sport equipado con un sistema de conducción autónoma nivel 4 ha sido puesto a prueba en una via urbana simulada.

Jaguar Land Rover es una de los fabricantes pioneros en lo que a conducción autónoma se refiere, y ahora ha hecho realidad uno de sus grandes objetivos: poner en la carretera una versión 100 % autónoma de uno de sus modelos. El grupo de automóviles británico (JLR) ha realizado por primera vez un test de conducción 100 % autónoma con uno de sus modelos, eso sí en una carretera que simula las condiciones de circulación urbanas.

Un Range Rover Sport con tecnología autónoma de nivel 4

La prueba fue realizada en Nuneaton con una unidad del Range Rover Sport equipada con un sistema de conducción autónoma de nivel 4, lo que significa que el vehículo puede conducir por sí mismo y sin ayuda del conductor, aunque la supervisión de una persona detrás del volante sigue siendo necesaria en este nivel.

El test fue realizado en una carretera urbana simulada

Según Jaguar Land Rover, el vehículo es capaz de circular en rotondas, cruces e incluso frenar delante de la línea de un semáforo. Las pruebas pertinentes fueron realizadas en un circuito que simuló las condiciones de una carretera urbana.

Las tecnologías de conducción autónoma que Jaguar Land Rover está desarrollando

Al parecer, Jaguar está desarrollando una serie de tecnologías de conducción autónoma y conectividad en el centro de pruebas de Nuneaton. Entre ellas destacan la Advertencia de Vehículos de Emergencia (EVW), el Aviso de Colisión en Intersecciones (ICW) o la Aviso de Señalización dentro del Vehículo (IVS); una tecnología que podría servir para sustituir las cámaras interiores de los vehículos para reconocer las señales de tráfico e informar al conductor de ellas. Con mucha frecuencia, las cámaras de los vehículos confunden la señalización de la vía, pero el sistema IVS utiliza una transmisión de datos de carretera más fiable que garantiza que la información es correcta.

El grupo británico ya cuenta en sus modelos con tecnología de conducción autónoma nivel 2 y 3, lo que permite a sus coches circular de forma autónoma en autopista en determinados momentos.