Hyundai Ioniq 2019: acutalización para las versiones híbridas

El nuevo Hyundai Ioniq llegará tras el verano con cambios que afectan principalmente a la estética y al equipamiento.

El Hyundai Ioniq fue la primera berlina en presentarse en el mercado con tres variantes de propulsión: híbrido, híbrido enchufable y eléctrico. Ahora, pasados tres años desde su lanzamiento, Hyundai renueva la gama anunciando cambios en las dos versiones híbridas. Unos cambios que sin duda le van a sentar muy bien a un coche que sigue siendo una alternativa muy a tener en cuenta para los que buscan una berlina cómoda para uso diario y viajar con un bajo consumo sin recurrir al diésel, y necesiten contar con etiquetas ecológicas de la DGT para moverse por ciudad sin restricciones.

Con alrededor de 60.000 unidades comercializadas desde su lanzamiento en 2016, el Ioniq es uno de los pilares de Hyundai y su principal apuesta hacia una movilidad sostenible.

En el Salón de Ginebra que abre sus puertas el próximo día 5 de marzo conoceremos más detalles, y descubriremos si también llegan los cambios al Ioniq eléctrico. De momento, en estas primeras imágenes podemos apreciar el rediseño de los paragolpes y la adopción de la nueva parrilla en cascada de la marca, que repite el diseño visto en sus últimos modelos, como el Hyundai Santa Fe. También se anuncian nuevos colores de carrocería.

En el interior lo más destacado es el nuevo “centro de control”, una pantalla táctil para el manejo de los sistemas de información y entretenimiento. Alcanza ahora las 10,2 pulgadas, y no falta la compatibilidad con Apple CarPlay y Android Auto, ni los servicios online de Hyundai LIVE. Hyundai también anuncia la incorporación de la última evolución de su sistema de seguridad, denominado SmartSense, con las principales ayudas a la conducción y los asistentes más comunes hoy en día.

No hay cambios significativos en los motores, ni en las prestaciones o la autonomía en modo eléctrico del modelo híbrido enchufable. Se incorpora, eso sí, el sistema denominado GDM (Green-zone Drive Mode), destinado a facilitar al conductor la tarea a la hora de conseguir la máxima eficiencia. Se trata de un sistema capaz de adaptar el funcionamiento del grupo propulsor según la situación, para aprovechar al máximo la energía eléctrica.