El prototipo DS X E-Tense se luce con un aire muy castizo
Cual chulapo con porte madrileño se ha paseado por las calles de la capital el concept car eléctrico de DS
El prototipo DS X-Tense representa el futuro a medio plazo de DS Automobiles según su equipo de ingenieros de diseño. O, al menos, como podrían ser las líneas básicas de sus coches deportivos en el año 2035 porque éste es el objetivo de este concept car que ha recorrido algunas calles de Madrid.
Presentado en verano de 2018, el DS X E-Tense la apuesta por el vanguardismo es la premisa de este prototipo que muestra un coche eléctrico distinguido y no solo por lo asimétrico de su imagen, sino por ser un lienzo en blanco materializado en forma de automóvil de futuro.
Con hasta tres plazas disponibles, la configuración interna del DS X E-Tense es peculiar, tanto o más que incluso la externa.
La belleza de la asimetría
Con una arquitectura que se apoya en un chasis elaborado en fibra de carbono, la carrocería muestra soluciones basadas en el uso de tecnologías adaptativas y responsivas según la situación de la conducción.
Por ejemplo, cuenta con unas rejillas en su frontal que modifican su disposición según el ritmo del vehículo, de esta forma, se abren o se cierran permitiendo mayor o menor flujo de aire para mejorar su eficacia aerodinámica.
Y si su carrocería busca la eficiencia, la mecánica eléctrica más. Con dos motores eléctricos de 400 kW (540 CV), la potencia máxima que logran en conjunto llega a 1.000 kW (1.360 caballos), según la configuración del modo de respuesta.
Este poderío procede de la experiencia acumulada por el equipo DS Performance participante en el campeonato de Formula E.
Y es que el DS X E-Tense aúna el lujo y la deportividad en proporciones similares ya que, no solo el uso de materiales de alta calidad y con un diseño elitista sino que se inspira en el cockpit de los coches de competición utilizados en los monoplazas de DS Performance.
Pero también está pensado para disfrutar de su uso de otra forma ya que, gracias a su capacidad para circular mediante conducción autónoma, el puesto de conducción podría quedar liberado y desplazar a su ocupante principal a la butaca lateral cubierta por una cápsula acristalada, cuya puerta realiza su apertura y cierre imitando al movimientos de las alas de una gaviota.
El acristalamiento tanto de su bóveda como del suelo de las plazas situadas a la derecha del puesto de conducción, permite, además de ver lo que acontece, aumentar la sensación de espacio interior.
Además, el tapizado de los asientos tiene un revestimiento en piel de alta calidad y cubren los hombros del ocupante con una curiosa colección de pequeñas inserciones que recuerdan a las plumas de las aves. Butacas calefactables y ventilados que fomentan el confort durante el viaje.
Sin duda el DS X E-Tense es un prototipo que jamás llegará a producirse en serie pero que permite atisbar las líneas de diseño y la orientación de los productos más lujosos de DS Automobiles en unos años vista.
Comentarios cerrados