¿Cuál es el coche con más kilómetros de la historia?

La bonita historia que os traemos tiene como protagonista al coche con más kilómetros de la historia, un Volvo P1800S que ha completado todo su kilometraje con un único propietario.

Los kilómetros que marca nuestro automóvil en el odómetro son uno de los puntos clave a la hora de decidir si lo sustituimos por otro. Además, a la hora de claves a la hora de comprar un coche de segunda mano, se convierte en uno de los puntos en los que más nos fijamos, puesto que si tiene muchos kilómetros, lo asociamos  a que al le queda poca vida. No obstante, cuando conozcáis la distancia recorrida por el coche con más kilómetros de la historia, vuestra concepción cambie.

Sin embargo, es cierto que muchas veces le damos demasiada importancia a este dato. Los kilómetros que pueda tener un vehículo tienen importancia, pero más importancia tiene su mantenimiento y el uso que se le haya dado durante toda esa distancia recorrida.

Nos explicamos, es más que posible que un coche con 250.000 kilómetros, que haya tenido un correcto mantenimiento y un buen uso esté en mejor estado que uno con 100.000 kilómetros al que no se le ha prestado la más mínima atención. Además, es muy diferente que los kilómetros se hayan hecho en autopista o en entornos urbanos, puesto que es en ciudad donde más desgastamos la mecánica del automóvil.

Este Volvo P1800S tiene el récord Guiness de coche con mas kilómetros

Prueba de que el kilometraje de un vehículo es un simple dato es nuestro protagonista de hoy. Se trata de un Volvo P1800 que ostenta el récord Guinness de ser el coche con más kilómetros a sus espaldas. Factores clave para haber conseguido este honorable título ha sido un mantenimiento exquisito y un dueño que lo ha conducido siempre con cariño y cuidado.

La historia de nuestro protagonista es en realidad una historia de amor: amor entre el automóvil y su dueño, o lo que es lo mismo, Irv Gordon y su Volvo P1800S. Irv nació en el año 1940 y vivía en Nueva York. Su profesión era la de profesor de escuela, por lo que trabajaba en un colegio que estaba a nada menos que 100 kilómetros de su casa. Por ello, necesitaba un coche fiable para hacer los 200 kilómetros diarios que debía completar para ir y volver de trabajar.

Gordon tuvo un Chevrolet Corbair que se convirtió en toda una pesadilla, puesto que pasaba más tiempo en el taller que rodando por las autopistas estadounidenses. Por ello, el 30 de junio de 1966 decidió hacerse con el que sería ya el «otro amor» de su vida: un bonito Volvo P1800S de color rojo. El precio que pagó por el Coupé sueco fue de 4.150 dólares, un precio equivalente a los que serían 28.000 euros en la actualidad.

Irv Gordon y su Volvo P1800S eran dos viajeros incansables

El primer fin de semana que Gordon y este Volvo P1800S unieron sus vidas recorrieron nada menos que 2.400 kilómetros, por lo que al lunes siguiente ya le hizo la primera revisión. Esto fue toda una declaración de intenciones, puesto que ocho años después el Volvo ya marcaba en el odómetro más de 800.000 kilómetros.

Este Volvo ha tenido un mantenimiento exhaustivo en el taller de confianza de Irv, por lo que seguro que siguió estos 10 consejos antes de llevar el coche al taller. Sin embargo, no vale sólo con llevarlo al especialista cuando se necesite, sino que hay que cuidar el automóvil día tras día. El vehículo siempre fue conducido con suavidad, a velocidades no demasiado altas y siempre teniendo en cuenta que la mecánica estaba para mimarla. Tan bien lo mimaba nuestro protagonista que el Volvo P1800S llegó a los 400.000 kilómetros con todos los componentes con los que había salido de la fábrica.

Fue en 1987 cuando nuestros dos protagonistas superaron el millón de millas recorridas o, lo que es lo mismo, algo mas de 1,609.000 kilómetros. Tras 21 años de servicio incansable, Irv decidió que era el momento de reconstruir el motor de forma preventiva, aunque el coche no lo pedía.

Esta historia llamó la atención de Volvo por primera vez, por lo que la marca sueca decidió premiar su fidelidad regalándole un exclusivo Volvo 780 Coupé. Gordon lo recibió con los brazos abiertos, pero siguió utilizando su inseparable compañero para recorrer Estados Unidos de costa a costa.

Tanto Gordon como el Volvo P1800S siguieron sus incansables trayectos, por lo que en 2002 el coche superó los dos millones de millas, es decir, más de 3,2 millones de kilómetros recorridos. La alta cúpula de Volvo se volvió a fijar en esta increíble historia, por lo que regalaron un Volvo C70 a Gordon para dar descanso a su anciano vehículo. Sin embargo, nada más lejos de la realidad: Irv Gordon juró amor eterno a su Volvo P1800S y eso no iba a cambiar en la vida.

Siete años después, en 2009, el motor del coupé sueco volvió a ser reconstruido después de 22 años de servicio, puesto que el altísimo kilometraje había hecho que el motor perdiera compresión. Una vez hecho esto, Gordon siguió con lo que más le gustaba: conducir su flamante Volvo de toda la vida. En 2013, el coche rompió la increíble barrera de los 3 millones de millas (concretamente 3,039.122 millas acreditadas por los Guiness World Récords) conduciendo por las carreteras de Alaska.

Tras superar esta cifra, Volvo consideró que debían cederle un vehículo más cómodo para sus viajes debido a que los médicos recomendaron a nuestro protagonista que debía relajarse, por lo que regalaron a Irv un Volvo CX60. Sin embargo, Irv Gordon era un hombre de costumbres y no entendía la vida si no era tras el volante de su clásico.

El momento triste de esta maravillosa historia vino el 15 de octubre de 2018, cuando la hija del Volvo P1800S anunció en una red social que su padre había fallecido en China. Su compañero de vida marcaba en ese momento la friolera de 3,260.257 millas, es decir, 5,25 millones de kilómetros.

Desconocemos cuál ha sido el paradero del Volvo P1800S que ostenta el título de coche con más kilómetros de la historia, pero sin duda, debería estar en un museo de la marca al lado de un retrato de Irv Gordon. Y es que esta historia ha sido como la de los matrimonios más felices: juntos hasta que la muerte nos separe.